Publicado: 05/03/2016 15:17
Los patrocinadores no son las únicas fuentes de ingreso que los grandes clubes tratan de exprimir para afrontar el salvaje gasto de sus plantillas. Ahora son las marcas deportivas las que deben rascarse el bolsillo si quieren seguir vistiendo a los dos grandes del fútbol español. Tanto Real Madrid como Barcelona están renegociando sus contratos con Adidas y Nike y las exigencias económicas de superarán por primera ver la histórica barrera de los 100 millones por temporada.
Todo ha arrancado por la firma del nuevo contrato del Manchester United. El club inglés, que ha vestido Nike durante los últimos 13 años, ha firmado un contrato de diez años con Adidas. La marca alemana pagará 94 millones por cada una de las diez temporadas firmadas, por lo que ingresará un total de 940 millones por lucir la marca competidora de Nike, que le vestía hasta hace unos meses.
El aumento exponencial de ingresos por vestir una marca deportiva tiene como origen el nuevo contrato firmado por el Manchester United, ex de Nike, por Adidas durante diez años a razón de 94 millones por temporada
Una vez confirmado el acuerdo, Real Madrid y Barcelona han contactado con las marcas que visten para revisar sus contratos. Según se ha filtrado, Adidas estaría negociando un contrato con el Real Madrid que le permitiría cobrar una cifra que se acerca a los 140 millones de euros anuales, casi lo mismo que los ingresos por derechos de televisión madridista. El Barcelona, por su parte, tiene contrato con Nike hasta 2018, a razón de 54 millones por año. Lo que supone unos ingresos muy distantes del contrato firmado por el Manchester United o el que está negociando el Real Madrid. Ahora exige una cifra en la negociación que asciende a 90 millones, y con diferentes bonus y pluses alcanzaría a los 100 millones anuales.
El escaparate azulgrana es especialmente complejo, porque en el Barcelona, que es un equipo muy significado con Nike, actúa el jugador icóno de Adidas, Lionel Messi. Pero además de eso, tienen en sus filas al brasileño Neymar, que se va a convertir en el jugador franquicia de la marca en los próximos años desbancando al madridista Cristiano Ronaldo. Así que los dos referentes de ambas marcas vestirán de Nike en el Barcelona y la marca estadounidense quiere rentabilizar eso.
Todo apunta a que Real Madrid y Barcelona no se cambiarán de acera y seguirán siendo los buque insignia de Adidas y Nike, respectivamente. Pero atar a ambos clubes para a suponer una mejora sustencial de sus contratos, casi doblando la actual cantidad que ingresan por vestir las marcas. Los blancos, pese a claudicar en el césped ante los culés, dominan aún el ámbito publictario y markentiniano, por lo que sus ingresos son netamente superiores. Tanto en el tema de los patrocinadores como en el de las marcas deportivas.
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