Casillas y sus mensajes subliminales: ¿se va del Madrid porque cree que ya no le queda nada que demostrar?

De vez en cuando, a Iker Casillas le gusta jugar con la simbología para enviar mensajes cuyo significado sólo los más allegados conocen. Hace dos años, en mayo de 2013, el capitán del Real Madrid publicó la siguiente foto en su cuenta oficial de Instagram:

Por aquel entonces ya bullía la guerra civil del madridismo, con José Mourinho en el banquillo y la figura de Casillas en entredicho por parte de la grada. Los mourinhistas ya calificaban a los aficionados casillistas y antiMou como "piperos", y la fotografía de Iker alimentó el debate.

Ahora, el guardameta mostoleño ha vuelto a hacerlo. Tras recibir pitos en el Bernabéu durante el partido del sábado ante el Deportivo, Casillas se fue a cenar a un restaurante donde vio colgada la reproducción de un famoso cuadro, El hijo del hombre, del belga René Magritte.

Casillas publicó el cuadro en su cuenta de Instagram con la siguiente etiqueta, en inglés y castellano: #elsecretodethomascrown. El portero del Madrid se refiere a la película de ese título El secreto de Thomas Crown, protagonizada por Pierce Brosnan y Rene Russo, en la que el cuadro tiene protagonismo principal en la trama.

Especular sobre sus intenciones es precisamente lo que Iker parece querer provocar con su extraña publicación. Algunos se centraron en la propia obra pictórica y en lo que el autor decía de ella: "Todo lo que estamos viendo esconde otra cosa, nosotros queremos ver lo que está escondido por lo que vemos, pero es imposible. Los humanos esconden sus secretos demasiado".

También puede ser que una de las claves resida en el protagonista que da nombre a la película. Y en la sinopsis oficial de la misma, que dice textualmente: "Al multimillonario y distinguido Thomas Crown no le queda nada que demostrar: es un triunfador nato. Pero no se siente satisfecho, así que planea robar un Monet del Museo de Arte Contemporáneo de Nueva York".

Casillas, también millonario, ¿considera que ya no le queda nada que demostrar en el Madrid?, ¿no se siente satisfecho con sus situación?, ¿planea irse a otro club?

Demasiadas preguntas a las que sólo puede responder Iker. Que a lo mejor sólo pretendía mostrar su gusto por un cuadro y por una película. Nada más.