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El Buscón

Portazo a Pedro Sánchez: Antonio Costa no quiso comparecer con él en Lisboa

Pedro Sánchez y Antonio Costa, antes de su entrevista de ayer en Lisboa.

En el equipo del secretario general del PSOE se justificó este jueves por “motivos de protocolo” la ausencia del primer ministro portugués, Antonio Costa, de la rueda de prensa que Pedro Sánchez ofreció al finalizar el encuentro mantenido entre ambos en Lisboa. Según este criterio, Costa solo podría haber compartido con Sánchez la presencia ante los medios si éste hubiera llegado ya a La Moncloa y el encuentro se hubiera celebrado en la mansión oficial que el primero ocupa en la capital portuguesa junto al Palacio de São Bento. El hecho es que Sánchez apareció ante los periodistas en solitario, a pesar de que la entrevista con su homólogo portugués tuvo lugar en la sede del Partido Socialista luso, situada en el número 2 de la calle Largo do Rato, junto al barrio de Príncipe Real.

Antes de entrevistarse con Costa, el equipo de Sánchez había difundido a los medios acreditados para la visita información sobre las excelentes relaciones que mantienen los dos partidos socialistas y, en particular, sus dos principales líderes, realzando sobre todo el carácter político de la visita, en un momento en el que Sánchez intenta que cuaje en España una alianza a la portuguesa, pese a haber sido el PP el ganador de las elecciones. El propio secretario general del PSOE presumió de tener en Costa a uno de sus principales interlocutores internacionales, pues es con el que mantiene una comunicación más estrecha, sobre todo desde que forjó una inesperada e inédita alianza con el Bloque de Izquierda, fiel aliado en la UE de Podemos y Syriza y el ortodoxo Partido Comunista de Portugal. Este pacto entre el PS y ambos partidos, dos fuerzas críticas con el euro y la Unión Europea, es de ámbito parlamentario y no tiene reflejo en la composición de Gobierno, formado por miembros del Partido Socialista y afines.

Primer viaje al extranjero desde el 20D

El secretario general del PSOE ha recuperado con Costa su agenda internacional tras las elecciones, a pesar de que no iba a ser ni mucho menos uno de los principales protagonistas en la conferencia política que Sánchez tenía previsto celebrar para presentar su programa electoral y que tuvo que interrumpir el pasado noviembre como consecuencia de los atentados de París. En aquella ocasión, el Partido Socialista sí destacó en ella, como invitados de relieve, la presencia del primer ministro francés, Manuel Valls y la del presidente del Parlamento europeo, Martin Schulz. El propio Valls adelantó la víspera del encuentro, antes de que sucedieran los atentados, que no viajaría a Madrid, aviso que fue recibido con profundo malestar en el equipo de Sánchez.

Lo que está fuera de toda duda es que la relación de Costa con Sánchez es mejor que la que el primer ministro luso mantiene con Mariano Rajoy. Ambos han intercambiado solo impresiones en algún Consejo europeo, después de que la llegada del Partido Socialista al Gobierno en Portugal coincidiera con la campaña electoral en España. Ello explica que Rajoy no solo no le diera la bienvenida, sino que vaticinara que la coalición de izquierdas iba a ser muy negativa para los intereses europeos, pues a su juicio no respetaba lo que los ciudadanos portugueses habían dicho en las urnas, donde el vencedor de los comicios celebrados en octubre fue el conservador Pedro Passos Coelho.

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