Morbo en el PSOE: ¿dará Tomás Gómez el espectáculo ante los 38 jerarcas del partido?

Tomás Gómez parece condenado a convertirse en paseante de las tertulias televisivas después de lanzar todo tipo de amenazas contra la actual dirección federal de su partido por destituirle como cabeza de los socialistas madrileños. La expectación es máxima porque se da la circunstancia de que Gómez continúa siendo miembro de la ejecutiva federal socialista, cuya próxima reunión está prevista para el lunes. ¿Tendrá el madrileño nacido en Países Bajos la bravura de dar la cara y presentarse dentro de tres días a la cita que le ha congregado hasta ahora todas las semanas con la cúpula de su partido? Apuestas las hay para todos los gustos, desde quienes opinan que lo hará para dar el correspondiente espectáculo mediático y demostrar que los tiene bien puestos, hasta las de quienes creen que no se someterá a esta tortura, evitando forzar un ambiente de gran tensión entre los que han sido hasta ahora sus compañeros de fatigas desde el congreso extraordinario celebrado el pasado julio.

Hay tres personas dentro de la ejecutiva federal que le han demostrado a Tomás Gómez una cierta simpatía. Una es la exministra de Defensa Carme Chacón. En el otoño de 2013, cuando el liderazgo de Alfredo Pérez Rubalcaba ya estaba en entredicho, Chacón se recorrió casi 14.000 kilómetros, los que separan Miami de Madrid, para presentar al exlíder madrileño en uno de los desayunos habituales que se celebran en la capital. A los que entonces tenían dudas de su cercanía, Gómez les lanzó un mensaje rotundo apoyando a la exministra como sustituta de Rubalcaba. ¿Decir que no se debe votar a alguien porque es catalán, como único pretexto, no es negar a los catalanes sus derechos como españoles?, dijo Gómez en aquella ocasión, aprovechada también para exigir elecciones primarias urgentes.

Otros apoyos en la ejecutiva federal

Aparte de Chacón, Gómez podría encontrar apoyos en el secretario de Política Federal, Antonio Pradas, descontento con la forma en que Pedro Sánchez ha descabezado el partido en Madrid, y en el valenciano Ximo Puig, igualmente crítico con la sobreactuación del secretario general. En todo caso, un respaldo minúsculo teniendo en cuenta que la ejecutiva la integran 38 personas, de las que 11 de ellas son vocales y no tienen responsabilidad en un área definida.

En la sede socialista de Ferraz mosquea que Gómez haya anunciado ya que deja su escaño en la asamblea madrileña, después de ver cómo se le cambia la cerradura del que hasta ahora era su despacho en el PSM, y, sin embargo, haya dejado en el aire la continuidad de su pertenencia al máximo órgano de dirección de su partido. El lunes se despejarán estas incógnitas.