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El Buscón

Comida de consortes en La Moncloa para confraternizar en tiempos tan duros

Desde que este Gobierno nació como tal en diciembre del año pasado, los cónyuges de los ministros no habían tenido oportunidad de confraternizar en privado y menos aún de cambiar impresiones más que en determinadas cenas esporádicas de fin de semana donde se han juntado algunas parejas amigas o en ciertas recepciones oficiales donde el protocolo suele frenar las muestras de expresión más informales.

El caso es que con motivo del día de la Hispanidad, a iniciativa de la mujer del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro y con la esposa del presidente del Gobierno como anfitriona, se juntaron a comer en La Moncloa los cónyuges de los titulares de las diferentes carteras para pasar un rato agradable e intercambiar opiniones sobre la actualidad más rabiosa. El objetivo era conocerse mejor y sentar un precedente al margen de la cena que Mariano Rajoy probablemente ofrecerá las próximas Navidades para cumplir con los miembros de su Gabinete y sus consortes.

La experiencia resultó positiva, el ágape fue muy sencillo y lo que más sorprendió a una de las asistentes fue que la mujer del presidente del Congreso, Jesús Posada, invitada también a la comida, no se cortó un pelo y apareció en La Moncloa con coche oficial. El detalle fue objeto de numerosos comentarios, teniendo en cuenta que el resto de los convocados llegó al Palacio en vehículos privados. Bueno, también fue muy comentada la jovialidad de la mujer de Montoro y la sobriedad de la de Luis de Guindos. Y es que, al final, este tipo de iniciativas, también se prestan al cotilleo. La mayoría de las conversaciones cruzadas versaron sobre los tiempos tan duros que atraviesa España y la dificultad para abordarlos con acierto desde el Consejo de Ministros.

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