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El Buscón

Ruz riza el rizo: pide al cuñado de Bárcenas datos para seguir investigando al extesorero

La actividad investigadora del titular del Juzgado Central de Instrucción número 5, Pablo Ruz, no repara en nada. Ni siquiera en que a alguna de las personas a las que pide datos para continuar sus pesquisas sobre los célebres 'papeles de Bárcenas' tiene una relación 'muy cercana' con el polémico extesorero del PP. Es lo que ha pasado este viernes con su último auto. En su afán por recabar pistas sobre las supuestas idas y venidas por la calle Génova de los ocho empresarios imputados en la causa, el magistrado ha pedido al "encargado de Seguridad del Partido Popular" que le facilite "información de los registros de entrada" entre 2001 y 2008 de la sede central del partido, detallando "día, mes, año y persona a visitar" por estas ocho personas. De lo que quizás el juez no se haya dado cuenta es que dicha petición se la ha hecho nada menos y nada menos que a Antonio de la Fuente, el cuñadísimo de Luis Bárcenas.

A De la Fuente no le queda otra, por tanto, que recopilar unos datos que pueden perjudicar, y muy seriamente, al hermano de su mujer, Maria del Carmen Bárcenas. Y todo ello en un momento en el que, además, todos en el cuartel general popular dan por hecho que sus días como trabajador de Génova 13 -donde le colocó, cómo no, su poderoso familiar- están más que contados. Daños colaterales de la particular batalla que libran desde hace bastante tiempo su cuñado y la actual secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal. Ésta se la tiene jurada al extesorero, pero también a su cercano familiar, al que hace tiempo que considera una persona que 'sabe demasiado'. De hecho, el cuñado de Bárcenas maneja información sensible sobre quién entra y quién sale de Génova -lo que ahora le pide el juez Ruz-, y cómo y cuándo se producían las reuniones más confidenciales. Ahí es nada.

Por todo ello, no es extraño que De Cospedal lo considere una personaje de "alto riesgo" para el propio partido y, sobre todo, para sus dirigentes, que ya no saben a qué agarrarse con tanta sacudida del terremoto Bárcenas. También es lógico que el juez Ruz lo valore como una buena fuente de información, quizá la única que pueda recabarle los datos que pide sobre la vida 'social y económica' del partido. Él es, de hecho, el único que da instrucciones a la veintena de personas que se encargan de que nada pase -ni salga- de la sede del partido sin ser controlado.

Lo cierto es que, como ya informó este Buscón, la tensión que desde hace meses sufre el "encargado de seguridad del Partido Popular" ya le ha pasado factura física y hace ya tiempo que el cuñadísimo se ha visto obligado a cogerse una baja laboral. Una buena forma de blindarse ante un despido "en diferido y con simulación de indemnización" y, tal vez, de escurrir el bulto ante la Justicia y no ser él quien tenga que dar al juez los datos que pueden poner aún en mas aprietos a la mano que le ha dado de comer todos estos últimos años. ¿El PP? No, su cuñado.  

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