Tras devorar el 'Marca', Rajoy lee primero 'La Razón', después 'ABC' y luego 'El País'

Dicen los periodistas veteranos que, frente al dicho habitual, una palabra vale más que mil imágenes. Pero este aserto no siempre se cumple porque en ocasiones una imagen vale, efectivamente, más que mil palabras, sobre todo según quién las pronuncie. Por ejemplo, las fotografías de la entrevista a Mariano Rajoy en 'Radio Nacional' nos dicen mucho sobre sus hábitos de lectura, que quizás sea un dato más interesante que todo lo que dijo el jefe del Ejecutivo. Ahí tienen la instantánea. Juzguen ustedes mismos si el orden en que están colocados los periódicos es aleatorio o, como cree este Buscón malvado, los rotativos están situados según las preferencias del presidente del Gobierno. De los cuatro grandes diarios generalistas, el lugar preeminente es para La Razón, cómo no. Después viene el otro diario conservador, Abc. En tercer lugar, El País. Y, por último, El Mundo. No aparece, eso sí, el periódico favorito de Mariano, que como todo el mundo sabe es el Marca, como tampoco se ve puro alguno. Acaso porque los fontaneros monclovitas querían evitar el escándalo...  

Si ustedes tampoco creen en las casualidades, estarán de acuerdo en que en la sede del diario monárquico por excelencia no habrá sentado bien esta imagen. Hasta ahora, siempre se había pensado que el rotativo predilecto de Rajoy entre los generalistas era Abc. Pero el otro diario conservador, La Razón, le ha adelantado por la derecha. A veces este Buscón tan mal pensado sospecha que ambos diarios compiten, a golpe de portadas positivas, cómplices o serviles con el Gobierno, por convertirse en el periódico más marianista. Los chicos de Abc que comanda Bieito Rubido van a tener que esforzarse mucho para superar al bueno de Francisco Marhuenda, director de La Razón, que se ha convertido en un pretoriano del marianismo. Ahí le tienen, en cualquier tertulia arenosa o embarrada, peleando contra quien haga falta.    

Tampoco sorprende que El País aparezca colocado en tercera posición. Como es de bien nacidos ser agradecidos, Juan Luis Cebrián y sus súbditos de Prisa tratan cada vez mejor en sus primeras planas a Mariano, cuyo Gabinete ha favorecido, por acción y omisión, el rescate bancario del holding de medios que navegaba a la deriva. El último puesto en esta clasificación es para El Mundo. Y nuevamente no resulta asombroso que el diario de Pedro J. Ramírez esté ubicado a la cola. Las relaciones entre el rotativo de Unidad Editorial y el Gobierno no pasan por su mejor momento. Se conoce que en el Ejecutivo no llevan bien esas críticas furibundas. Tanto es así que esta misma semana nadie del Ejecutivo visitó la sede de El Mundo para asistir a la entrega de sus premios periodísticos. Incluso, Pedro J. acusó al Gobierno de boicot. 

Como decíamos, lo peor de la imagen es que no salga la cabecera de Marca. Pero, ya saben, los guardianes de lo políticamente correcto que asesoran a los dirigentes cuidan mucho los detalles. En la fotografía pueden ver, queridos lectores, que tras los generalistas vienen La Vanguardia y El Periódico, quizás para cubrir la cuota catalana. Luego viene La Gaceta y, por último, ahí tienen los salmones Expansión y Cinco Días. No nos quejaremos aquí del agravio comparativo que supone para nosotros, como medio digital, esta exclusión inaudita. Pero, queridos señores de protocolo, no hubiera estado mal incluir en la imagen algo de prensa extranjera de prestigio. Ah, perdonen, este Buscón despistado no caía en que el bueno de Mariano no es precisamente un políglota.