Publicado: 07/11/2017 04:00
Madrid ejerce de capital de España cada vez que reyes o presidentes visitan nuestro país en viaje de Estado. Los mandatarios pasan por el Ayuntamiento de Madrid donde el alcalde o alcaldesa le entrega de forma simbólica las llaves de la ciudad.
La ceremonia es una consecuencia de los acuerdos con el Ministerio de Asuntos Exteriores y se ha respetado desde hace muchos años, incluso con dictadores.
Ayer el Ayuntamiento decía que la brevedad la habían impuesto las medidas de seguridad. La delegación de Israel lo desmintió. “Nosotros –decía un miembro de la delegación- nos adaptamos a lo que nos dice el que nos invita”.
El acto se celebraba, hasta que llegó el Gobierno de Ahora Madrid, de forma solemne en el salón de Plenos de la Plaza de la Villa y se cerraba con chocolate con churros. Ayer la ceremonia de entrega al presidente de Israel, Reuven Rivlin, fue exprés.
El acto fue un encuentro de 15 minutos y en un salón del Ayuntamiento con unas banderas en miniatura en una mesa, frente a las grandes banderas y maceros que estaban presentes en la Plaza de la Villa. Fuera un pequeño grupo se manifestaba por la política de Israel contra el pueblo palestino. No se vio a ningún concejal de Ahora Madrid.
El acto fue un encuentro de 15 minutos y en un salón del Ayuntamiento con unas banderas en miniatura en una mesa. No se vio a ningún concejal de Ahora Madrid
Por el salón de plenos han pasado todo tipo de dirigentes, como el presidente Gadafi, que fue agasajado por el mismo Alberto Ruiz-Gallardón, o Hugo Chávez. El presidente chino, Hu Jintao, país sin democracia, o Honecker, en plena Alemania comunista, recibieron también este galardón.
Con motivo de la visita del dictador comunista hubo cierta polémica, pues los concejales de la derecha no querían homenajear al jefe de estado alemán. Sin embargo, se celebró el acto aunque un edil del PP, Carlos López Riaño, gritó: "¡Abajo el muro!"
Ayer no hubo esos gritos porque la mayor parte de concejales no estuvo en la sesión, reservada para los portavoces de los grupos políticos. Carmena, según testigos, no estaba cómoda. Se notó también la ausencia de Begoña Villacís (Ciudadanos).
En la oposición están a la espera de la próxima visita oficial que recibirá Madrid, el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas. Quieren ver si la ceremonia y la postura del equipo de Gobierno será similar a la que se ha organizado con el presidente de Israel.
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