"Un trilero, un delincuente...", así califican a Bárcenas en Génova, 13

“A mí no me tose nadie”, le respondió Luis Bárcenas a un ex ministro del PP cuando le reprochó en la sede del partido el bajo presupuesto que había reservado para un acto electoral en Andalucía. Y es que el ex tesorero estuvo durante casi dos décadas haciendo de su capa un sayo, confirma un alto dirigente de Génova, 13, escandalizado ahora por los datos que se están conociendo y dolido, al mismo tiempo, por la plena libertad que tuvo Bárcenas para sus movimientos con las ocho ejecutivas con las que convivió durante la etapa de José María Aznar, primero, y de forma mucho más efímera, después, en la de Mariano Rajoy.

Bárcenas dejó en 2009 el cargo de tesorero sin apenas simpatías dentro de los altos cargos del partido, especialmente de las mujeres, por su tono machista, sobre todo por la arrogancia con la que ejerció su cargo, primero a las órdenes de Álvaro Lapuerta, que este miércoles faltó a su cita con la Fiscalía por problemas de salud, y después con absoluto mando en plaza teniendo como subordinados a Páez y a Moreno. El primero de ellos ejerció un tiempo como gerente hasta que fue despedido y pegó un portazo a la puerta de Génova, probablemente llevándose papeles en su cartera.

“Es un trilero, es un auténtico delincuente, nos ha engañado a todos y la va a pagar…”. Así se oye hablar de Bárcenas en las altas instancias del PP, arrepentidas por no haber contado antes para gestionar las arcas del partido con tesoreros del perfil de José Manuel Romay Beccaría, que solo estuvo dos años escasos en el puesto, o de Carmen Navarro, actual tesorera, por la que todos en Génova, 13, ponen la mano en el fuego, incluido el propio Mariano Rajoy.