Parque eólico Merengue (Extremadura).
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El planeta se encuentra en plena emergencia climática y, en esa tesitura, la reducción de las emisiones de efecto invernadero se ha convertido en una prioridad para todos sus habitantes. Según datos de Naciones Unidas, hasta 130 países se han marcado el objetivo, o están en vías de hacerlo, de reducir a cero sus emisiones netas para mediados de Siglo, recogiendo así el guante lanzado por los Acuerdos de París para frenar el aumento de temperatura del planeta. Si bien la propia ONU advierte de que los esfuerzos que se hagan en este sentido durante los próximos cinco o 10 años serán decisivos para lograr mantener el calentamiento global por debajo de los 1,5 °C.
En ese monumental esfuerzo colectivo, todos los estamentos sociales, políticos y económicos juegan su papel, y una de las contribuciones más determinantes corresponde al sector energético. En los últimos años, Naturgy ha reforzado su compromiso con la lucha contra el cambio climático. La compañía tiene en la gestión responsable del medio ambiente uno de los ejes fundamentales de su estrategia a medio y largo plazo. Una vía, la de la descarbonización de la economía, que no solo es el camino más corto hacia un cambio de modelo para la vida sobre el planeta en clave sostenible, sino que también supone una oportunidad para la transformación de la propia compañía.
A finales de julio de este año, Naturgy presentó su nuevo Plan Estratégico 2021-2025. Esta hoja de ruta hacia el futuro de la compañía incluye un Plan de Sostenibilidad con objetivos concretos en el ámbito medioambiental, social y de gobernanza de cara a 2025, además de trazar las líneas maestras para alcanzar el objetivo global de cero emisiones y una potencia instalada de fuente renovable cercana al 60% en 2050.
El camino hacia descarbonización emprendido por la compañía, sin embargo, ya ha comenzado. En línea con el objetivo de ir acortando los plazos en la conquista de las cero emisiones, en los últimos tres años Naturgy ha logrado reducir en un 30% sus emisiones directas de gases de efecto invernadero y en un 16% las emisiones totales, además de incrementar en un 32% su capacidad de generación renovable instalada.
En los últimos tres años la compañía ha reducido en un 30% sus emisiones directas de gases de efecto invernadero y ha aumentado en un 32% su capacidad instalada de renovables
En 2020 Naturgy fue premiada en los Premios Europeos de Medio Ambiente a la Empresa de la Comisión Europea (EBAE, por sus siglas en inglés), como una de las empresas más respetuosas.
La transformación de Naturgy tiene en las energías renovables una de sus grandes palancas. La compañía energética ya marcó un hito en cuanto a su compromiso con la transición energética cuando en 2019 solicitó al Gobierno el cierre de sus plantas de carbón. El viraje del modelo se está completando con fuertes inversiones en energías renovables tanto en España como a nivel internacional. La energética cerró 2020 con 4,6 GW en operación de tecnologías limpias, especialmente eólicas y fotovoltaicas.
El nuevo Plan Estratégico de la compañía contempla invertir más 8.700 millones de euros en renovables hasta 2025, lo que supone un 60% del presupuesto total para ese periodo. La inversión en renovables a nivel internacional y en España será de una media anual de 1.730 millones de euros, para incrementar el EBITDA de este negocio hasta los 1.000 millones de euros en 2025 (+22,4%).
Buena parte de estas partidas estarán focalizadas en países atractivos, con regulación estable y divisa fuerte, así como en proyectos en etapas tempranas de desarrollo y que contribuyan a la transición ecológica. Con ellas, Naturgy quiere triplicar su capacidad renovable instalada y pasar de los actuales 4,6GW a 14GW a nivel internacional en 2025. Las proyecciones para ese 2025 aceleran todavía más estos compromisos. La compañía espera alcanzar en ese año una reducción de sus emisiones totales del 24% respecto a 2017 y alcanzar prácticamente el 60% de la generación con energías renovables.
La energética cerró 2020 con 4,6 GW en operación de tecnologías limpias, especialmente eólicas y fotovoltaicas
Está previsto que el mayor crecimiento en renovables se produzca en Europa (+5,2 GW), seguido de Australia (+2,2GW), donde Naturgy se ha convertido en uno de los principales productores independientes de energía renovable. Otros mercados con potencial de crecimiento son Chile o Estados Unidos, país en el que la compañía ha reforzado recientemente su presencia con la adquisición de la Hamel Renewables, que cuenta con una cartera de proyectos de 8 GW en energía solar y 5 GW en almacenamiento.
Otra de las vías a través de las cuales la compañía quiere avanzar en materia de descarbonización es mediante la exploración de vectores energéticos más allá de la electricidad renovable. En la actualidad, Naturgy está explorando las posibilidades de distintos proyectos de biometano e hidrógeno verde por valor de 4.000 millones de euros.
En concreto, la compañía lleva años investigando el desarrollo del hidrógeno y tiene en marcha una serie de proyectos, entre los que destaca la colaboración con Enagás para impulsar conjuntamente en León la mayor planta de hidrógeno de España. El objetivo de esta iniciativa es producir hasta 9.000 toneladas al año de hidrógeno renovable a partir de una planta fotovoltaica de 400 MW y un electrolizador de hasta 60 MW. Con ello, se pretende cubrir el consumo local, dar apoyo a la red gasista y posibilitar una futura exportación hacia el noroeste de Europa.