La cara oculta de ser padres: el precio a pagar del que nadie habla

Ser padres es una bendición, o eso dicen. Te llena por dentro, te hace mejor persona, te cambia la vida... Pero ¿qué hay de lo malo? ¿Por qué casi nadie habla de lo duro que es criar a bebé? ¿Y de lo regular que se pasa cuando éste va creciendo hasta llegar a ser medianamente independiente? 

Aunque los que tienen descendencia aseguran que lo malo compensa con creces lo bueno de la crianza, tampoco hay que obviar que durante meses, incluso años, los padres no lo pasan del todo bien. 

La cara oculta de ser padres

De lo que más se quejan los padres primerizos es, sobre todo, de la falta de sueño. Y no están locos: un nuevo estudio de la Universidad de Warwick ha revelado la cantidad de horas de descanso que los progenitores pierden a causa de sus cachorros de humano.

Las madres primerizas se ven privadas de 22 minutos de sueño por noche; ellos solo de 14

Las madres primerizas se ven privadas de 22 minutos de sueño por noche, incluso una vez que el niño ha comenzado a ir a la escuela. Ellos pierden menos: 14 minutos por día. Desafortunadamente, los niños mayores se siguen despertando por la noche, enferman, tienen pesadillas... lo que no acaba hasta, más o menos, la edad de seis años.

Además, apunta el estudio, los padres pueden verse privados de sueño incluso sin que los niños les despierten, ya que aparecen las preocupaciones y tensiones derivadas de la recién estrenada paternidad, lo que dificulta la relajación.

Seis años de falta de sueño

Tras analizar a 2.541 mujeres y 2.119 hombres que fueron padres entre 2008 y 2015, los investigadores descubrieron además que ellas tienen muchas más probabilidades que ellos de que sus hijos las mantengan despiertas por las noches.

Las mujeres tuvieron más falta de sueño hasta que su hijo cumplió seis años. En los primeros tres meses, cuando los bebés están en su 'pico' de lloros, ellas perdieron 62 minutos de sueño por noche en comparación con antes del embarazo. Los hombres perdieron solo 13 minutos de media durante el mismo período.

Las mujeres tuvieron más falta de sueño que los hombres hasta que el niño cumplió seis años

Las mujeres tuvieron más falta de sueño hasta que su hijo cumplió seis años. En los primeros tres meses, cuando los bebés están en su 'pico' de lloros, ellas perdieron 62 minutos de sueño por noche en comparación con antes del embarazo. Los hombres perdieron solo 13 minutos de media durante el mismo período.

Dar el pecho implicaba 14 minutos adicionales menos de sueño perdido para las madres, que se veían obligadas a levantarse para alimentar a su bebé por la noche. No obstante, y aún sin amamantar, ellas seguían descansando menos que ellos. Así, cuando el niño tenía entre cuatro y seis años, ellas durmieron 41 minutos menos, y ellos apenas 14 menos.

Las madres, las más damnificadas

El estudio, publicado en la revista 'Sleep', afirma que en la mayoría de países desarrollados, las madres, incluidas las trabajadoras, todavía tienen más responsabilidades domésticas y obligaciones derivadas de la crianza de los hijos que los padres.

"En nuestra sociedad las mujeres siguen siendo las cuidadoras principales. Es más frecuente que la madre que cuide al niño cuando llora, y que haga más sacrificios", apunta el doctor Sakari Lemola, autor principal de la investigación.

Es más frecuente que la madre que cuide al niño cuando llora y que haga más sacrificios que el padre

"Aunque hay parejas en las que ocurre todo lo contrario, la realidad es que todavía son minoría. Esto explicaría por qué las mujeres pierden más horas de sueño", añade.

Lemola asegura que las preocupaciones con la paternidad se multiplican, ya que "antes de tener un hijo, uno solo es responsable de uno mismo, pero luego uno se hace responsable de un niño y de su familia". 

Tener hijos es una fuente importante de alegría para la mayoría de los padres, pero "puede traer estrés y tensiones que hacen que sea más difícil dormir por la noche".

Y tú, lector, ¿eres y vas a ser padre?