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Los móviles ponen fecha de caducidad a los parquímetros

Parquímetro

El móvil ha acabado -o está acabando-, con los reproductores de MP3, con las cámaras de fotos, las radios, el GPS y un sinfín más de dispositivos tecnológicos. 

Con los parquímetros todo apunta a que va a sumar otra muesca en la pistola. Así lo reflejan los datos y las decisiones que se están tomando desde los ayuntamientos más grandes de España.

En Barcelona, el objetivo, según fuentes del consistorio de total solvencia, es "digitalizar el 100% de los tickets de los parquímetros. De esta forma, se procederá a la retirada paulatina de máquinas físicas a medida que vaya decreciendo su uso".

En Madrid, los datos facilitados a este diario por el consistorio son reveladores. Si en 2014 el pago de parquímetros a través de aplicaciones móviles representaba el 16%, en 2015 se situó en un 26%, ascendió hasta el 36% en 2016 y ya está en el 41% en lo que llevamos de 2017. Se trata de un crecimiento del 156% del pago por móvil en poco más de dos años. En el caso de Barcelona, el pago vía móvil es del 15%.

La ventaja que ofrecen este tipo de aplicaciones es palmaria. No hay que desplazarse hasta el tótem físico, no hace falta llevar monedas -las aplicaciones se conectan al banco y realizan el pago- y se puede ampliar el tiempo de estacionamiento desde cualquier lugar.

El ayuntamiento de Barcelona cuenta con una aplicación de desarrollo propio, denominada ApparkB, para gestionar los tickets, cosa que de momento no está en los planes del consistorio madrileño, aunque los ciudadanos de la capital pueden pagar a través de aplicaciones de terceros.

En Barcelona el objetivo es digitalizar el 100% de los tíquets de los parquímetros e ir retirando las máquinas físicas de manera paulatina

Además, el ayuntamiento barcelonés pone a disposición del usuario la función Smart Tiquet, implantada en marzo de 2015, que permite al usuario conseguir un tiquet introduciendo la matrícula y evita volver al coche para poner el papel en el limpiaparabrisas, ya que el parquímetro transmite esta información a los dispositivos electrónicos de los operarios. Cuando fotografían la matrícula del coche, les aparece en pantalla el estado del tiquet virtual del propietario del vehículo, con lo que saben si multar o no.

La carga y descarga barcelonesa ya es 100% digital

Las operaciones de carga y descarga en la ciudad de Barcelona están completamente digitalizadas a través de una aplicación denominada AreaDUM (Distribución Urbana de Mercancías), que funciona con cualquier smartphone.

No obstante, el ayuntamiento catalán permite realizar este tipo de operaciones a través de SMS, para que los profesionales que no dispongan de dispositivos de última generación puedan hacerlo también desde el móvil.

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