Publicado: 29/08/2022 04:45
Actualizado: 29/08/2022 04:50
HBO estaba huérfano desde hace tres años. Pese a que en este periodo de tiempo ha estrenado algunas series potentes como 'Euphoria', 'Chernobyl', 'Years and Years', 'Mare of Easttown' o 'I May Destroy You', la plataforma sobrevivía al vacío que dejó el fenómeno 'Juego de tronos', que logró records de premios, audiencia y seguidores. Ahora, parece haber encontrado -aunque es pronto para saberlo-, a su sustituta. 'La casa del dragón' tiene todas las papeletas para convertirse en la nueva joya de la corona del servicio de 'streaming'.
Se trata de una nueva historia, pero juega con la ventaja de pertenecer al mismo universo que la original, por lo que, para sus seguidores, juega el papel de tirita tras el -duro- final de la primera. La nueva ficción basada también en una novela de George R. R. Martin, 'Fire and Blood' ('Fuego y sangre', 2018), se sitúa 200 años antes de todo lo ocurrido en la original y se centra en la familia Targaryen.
Es la primera serie derivada del fenómeno que logró récords y se consolidó como una de las ficciones más relevantes de la última década. Por ello, las expectativas están muy altas. Nadie se podía imaginar lo que sería 'Juego de tronos', pero a lo largo de sus ocho temporadas ha conseguido la ingente cantidad de 59 premios Emmy, logrando en una misma edición 32 nominaciones.
No solo eso, lo que comenzó como una ficción con una audiencia de 2,5 millones de espectadores de media en EEUU, terminó con 12 millones y, su último episodio lo vieron casi 20 millones de personas. La última temporada atrajo a más de 44 millones de espectadores por episodio en el país.
Primer episodio de 'La casa del dragón'
Tras ver el primer capítulo -de un total de 10- de 'La casa del dragón' ('House of the Dragon', en versión original) queda plasmado que, con un presupuesto millonario como el que se ha desembolsado para una sola temporada, las imágenes iban a ser espectaculares.
Aunque es pronto para predecirlo, el primer episodio no decepciona y cumple las expectativas en cuanto a historia y personajes se refiere. Es cierto que la atmósfera, los roles, la imagen y, por supuesto, el espectacular vestuario es el mismo que el de la ficción original, pero un punto muy positivo es que hay más historia que contar.
Hay que esperar para confirmarlo, pero solo el hecho de escuchar un "dracaris" de la boca de una Targaryen, que muchos ya tildan como una nueva 'Khaleesi', a los melancólicos de 'Juego de tronos' seguro que les ha puesto la piel de gallina.
La precuela ha jugado bien otra de sus bazas, que ya utilizó en la original. Los protagonistas no eran conocidos, salvo algunos rostros como los de Sean Bean, Liam Cunningham y Lena Headey, de entre decenas y decenas de personajes. En esta ocasión sigue la misma línea y, de momento, excepto Paddy Considine, Matt Smith y Elliott Tittensor, los demás aún no han logrado la fama en la industria.
Si ocurre lo mismo que ocurrió con la original, todos sus actores alcanzarán la máxima popularidad, como ocurrió con Emilia Clarke, Sophie Turner, Kit Harington -que podría estar en una secuela de la serie sobre Jon Snow-, Maisie Williams, Jason Momoa, Peter Dinklage, Natalie Dormer, Pedro Pascal, Richard Madden, Isaac Hempstead-Wright y un largo etcétera.
En este caso, la princesa Rhaenyra (interpretada por Milly Alcock -joven- y Emma D'Arcy -adulta-) es una de las claras protagonistas. También los son el que parece leal y bondadoso rey Viserys I (Paddy Considine), la reina Alicent Hightower (Emily Carey y Olivia Cook) y el claro vencedor en cuanto a crueldad se refiere, Daemon Targaryen (con, hasta el momento, la magistral actuación de Matt Smith), hermano del rey.
Sexo y violencia
En su primer capítulo, 'La casa del dragón' sacia las ansias de los seguidores de la original de volver a engancharse a una historia de tal calibre. Es cierto que, al centrarse solo en una familia y un reino -'Juego de tronos' abarcaba siete-, quizá la trama parezca más limitada pero, visualizado el primer episodio, queda vigente que hay mucho que contar.
Los que añoran las historias de criaturas fantásticas, luchas de poder, traiciones, sexo y violencia, están de suerte. Pese a que los propios creadores de la ficción aseguraron que en esta nueva superproducción no habría tanto sexo y violencia, sin entrar en 'spoilers', con el primer capítulo no lo cumplen. Hay escenas desagradables, crueles, sangre, mucha sangre, amputaciones, relaciones sexuales, orgías... Por lo que, también recuerda a 'Juego de tronos' en eso, pero ya son marcas de la casa.
Así, la pregunta radica en si los dragones, los personajes y la nueva trama tiene la suficiente solidez para aspirar a sostener el legado de 'Juego de Tronos' y cogerle el testigo. Lo que sí es recomendable es que aquellos que no han visto la primera serie, además de por ser una de las mejores de la última década, es que la vean. Entenderán muchas cosas y las referencias son constantes.
Avance del resto de la serie
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Pues espero que mejore, porque hasta ahora los dos episodios han sido sosísimos. De momento sólo hay un personaje que medio me parezca interesante, que es "EL malo" (y el hecho de que haya uno al que se pueda llamar como tal, en singular, ya es un cambio a peor respecto de JdT)
Pues el primer capítulo fue bastante decepcionante por lo predecible. Que la reina iba a morir en el parto es algo que estaba cantado, que la cándida niña sería entronizada como heredera más de lo mismo (hay que seguir dando papeles preponderantes a mujeres, incluso niñas, en sociedades altamente machistas, lo que es una incongruencia en sí mismo) y que el malo, malísimo, esté tan definido supone una lección de Primero de Maniqueísmo. O los guionistas se estrujan más las meninges o esto va a ser una producción Disney apta para todos los públicos.