El mayor deudor de España y la "inquisición moderna" de Hacienda

El empresario Agapito García Sánchez vendió en el año 1989 las cuatro empresas que poseía dedicadas al hormigón y otros materiales de construcción por una cuantía de 22,7 millones de euros a una empresa británica y, a partir de ese momento, inició una larga batalla con la Agencia Tributaria, que le acusó de usar sociedades pantalla para eludir impuestos. En 2015, el entonces ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, hizo pública una lista en la que aparecía como el mayor deudor de España y ahora un documental recoge su odisea y la larga batalla judicial que pone de relieve la voracidad del sistema tributario español.

El periodista y director Alejo Moreno es el responsable de este documental, que participa en la 66ª edición de la Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci), y que busca reflejar la "inquisición moderna" en la que se ha convertido Hacienda a partir de un caso que se ha convertido en una pelea de David contra Goliat, tal y como ha señalado el autor de la cinta durante una entrevista concedida a Vozpópuli.

El ejemplo de Agapito García Sánchez, que el pasado año logró la exoneración de un delito de fraude por el que la Fiscalía pedía cuatro años de cárcel, fue uno de los motores que impulsó a Moreno a realizar este documental. El otro fue la Declaración de Granada: un documento publicado en 2018 y firmado por 35 "prestigiosos" catedráticos de Derecho Financiero y Tributario en el que, entre otros asuntos, se ponía de relieve que Hacienda contempla a los ciudadanos como "súbditos".

Con este punto de partida, y a partir de voces de expertos en la materia, como Matías Cortés, catedrático de Derecho Tributario y coautor de la Declaración de Granada; Ignacio Ruiz–Jarabo, ex director general de la AEAT (1998/2001), o Iván Zaldúa, abogado tributarista y asesor de Xabi Alonso, entre otros, el cineasta pone sobre la mesa asuntos como los privilegios del fisco o la asimetría que se produce cuando un individuo se ve obligado a probar su inocencia, mientras que las acciones del Estado parten de una premisa válida y legal.

Deberíamos empezar a preguntarnos por qué esa fuerza de la Administración. En España hay muchas cosas que hay que cuestionar y también la deriva a la que hemos llegado. Asuntos como este, que tienen un impacto en la vida de los ciudadanos, ni siquiera están en el debate público", señala Alejo Moreno

Tal y como explica en el documental el abogado tributarista Javier Gómez Taboada, esta desigualdad se sostiene en la presunción de validez, de "herencia napoleónica" y que actualmente solo se aplica en España, Francia y España, aunque en estos dos últimos países con "muchos matices", en palabras de Moreno. "Deberíamos empezar a preguntarnos por qué esa fuerza de la Administración. En España hay muchas cosas que hay que cuestionar y también la deriva a la que hemos llegado. Asuntos como este, que tienen un impacto en la vida de los ciudadanos, ni siquiera están en el debate público", argumenta.

Hacienda: David contra Goliat

Tras más de un cuarto de siglo luchando contra el Estado, Agapito García Sánchez -que tiene pendientes más vericuetos y complicaciones de las que se ven en pantalla- no tiene capacidad para pagar lo que Hacienda aún le reclama. "La Agencia Tributaria tributaria me ha expoliado", denuncia en este documental.

Tal y como señala el director de Hechos probados, lo que más le llamó la atención del testimonio que ofrece en esta cinta es la "vehemencia" de las palabras con las que denuncia haber sido tratado "injustamente" por "todo un sistema", algo común que ha podido comprobar en sus investigaciones para este documental. "Lo que mueve a quienes pelean contra Hacienda es luchar contra una injusticia, no solo es una cuestión económica", apunta.

Todo esto retrae la inversión extranjera y la actividad económica, pero a priori es difícil aplicarlo porque se perdería mucha recaudación", destaca el director

Alejo Moreno espera que esta película abra un "debate" sobre una cuestión "mejorable" del Estado español que podría revertir en "mayor productividad" para el país. "¿Qué sentido tiene acabar, como en el caso de Agapito, con un holding de empresas de mil empleados? No nos damos cuenta de lo que significa un empresario: acabas con él y con su capacidad de generar riqueza, no puede generar más recursos. Si lo que quiere la Agencia Tributaria es recaudar es absurdo, porque matas a la vaca", reflexiona el director. En este sentido, apunta como alternativa los mecanismos anglosajones, "más dialogantes" con el contribuyente.

A su juicio, en España los ciudadanos deben ser "menos militantes" y preocuparse más por "aspectos que afectan transversalmente a todos, se vote lo que se vote". "Es una dinámica que va hacia delante y las implicaciones inmediatas a posteriori serían muy beneficiosas, porque todo esto retrae la inversión extranjera y la actividad económica, pero a priori es difícil aplicarlo porque se perdería mucha recaudación", sostiene.