Quantcast

Cultura

Mujeres y criados... o mejor todavía: ¡llega Lope de Vega con faldas y a lo loco!

Ana Villa, Lucía Quintana y Emilio Buale forman parte del elenco de 'Mujeres y criados'

"Que mujeres y criados/ pueden revolver a España", afirma Violante antes de salir de escena. Y no es para menos; menuda la que han liado ella y su hermana Luciana. Han tomado el pelo al conde Don Próspero, a su buen padre, a sus deseados o aborrecibles pretendientes... Y todo con ayuda de sus sirvientes. Ingeniosas, trepadas en esos taconazos de charol, han urdido a su antojo un estambre de enredos en los que al final todo queda clarísimo: tiran del hilo quienes menos pensamos. Féminas y siervos poco pintaban en el Madrid del siglo XVII, bien por cuestiones de sexo, bien por cuestiones de estamento. Pero entonces llegó Lope de Veg y lo puso todos patas para arriba con esta comedia inédita que llega, fresquita y en verso, directo desde el siglo de Oro al teatro Español, donde se representa en una versión dirigida por Rodrigo Arribas y Laurence Boswell.

Esta comedia inédita llega, fresquita y en verso, directo desde el Siglo de Oro al teatro Español

El texto de Mujeres y criados permaneció extraviado durante siglos y ahora que reaparece lo hace con potencia, algo así como una buena linterna venida del siglo de oro para barrer la oscuridad del XXI, un montaña de mugre acumulada durante más 400 años y que Lope espanta con piruetas de ingenio que ya quisiera para sí más de un monologuista. Se calcula que la última representación de Mujeres y criados de la que se tiene testimonio se celebró en Barcelona a finales de 1631 o principios de 1632. Y aunque no hay certeza sobre los datos exactos de su estreno, éste habría sido en el corral de las Comedias. Mejor no ha podido elegir el director Rodrigo Arribas el escenario del Español, donde permanecerá en cartel hasta el 24 de mayo.

Mujeres y criados es una comedia urbana de Lope. Se estima que fue escrita entre 1613 y 1614. Según Alejandro García Reidy, el investigador que consiguió la copia manuscrita en la Biblioteca Nacional en 2010, ésta es sin duda una comedia salida de la pluma de Lope: el análisis métrico se ajusta perfectamente a los usos del dramaturgo en esa época, de la que quedan obras como La dama boba, El perro del hortelano o De cuándo acá nos vino, verdaderas joyas a la que ahora se suma esta. En la versión que ahora dirige Arribas, el público podrá presenciar una versión adaptada de 2.900 versos en lugar de los 3.200 originales. Por cuestiones de reparto, se ha suprimido un pasaje.

Engrasar la máquina de la risa

Enredos, triángulos amorosos, diálogos agudos, criados avispados, métrica metálica… Porque si algo caracteriza esta obra es, justamente, es que está marcada por el tridente con el que Lope trinchó todo su teatro: la presencia del el amor, el ingenio y el poder como combustible de cuanto ocurre en la vida y en el escenario. Que de amores, enredos y pasiones bien sabía el dramaturgo, para muestra la veintena de hijos y las más de 1800 obras –según algunos biógrafos- que legó.

La comedia Mujeres y criados se desarrolla en Madrid. La protagonizan dos hermanas, Violante y Luciana, y por supuesto sus galanes: Teodoro, camarero del Conde próspero y Claridán, también secretario del noble. Estas dos parejas, cuyos amores han sido secretos hasta el momento, se ven comprometidas con la aparición de otros dos pretendientes: el mismo conde Próspero, que ansía a Luciana, y un rico -aunque ñoño- señor, quien intenta conquistar a Violante con el beneplácito del padre de la dama.

Mujeres y criados está marcada por el tridente con el que Lope trinchó todo su teatro: el amor, el ingenio y el poder

Ese es el esquema de partida para una trama que trocará en lío progresivo y sabroso, bien engrasada comedia que hace saltar la risa gracias a los chispazos de ingenio, que se aprecian más y mejor ahora en el siglo XXI, acaso porque su metal es más potente y su brillo más delicado. ¿Qué ocurre en la obra? Cuando el conde Próspero descubre que su camarero, Teodoro, ama a la misma mujer a la que él pretende, intenta alejarlo dela corte, pero Luciana se las arregla para trazar una estratagema : y con ella consigue engañar a su padre y al conde. Violante, su hermana, no se quedará atrás; echará especias al guiso de semejante ardid en el que sus propios sirvientes –Lope e Inés- serán de no poca ayuda.

Interpretadas por Lucía Quintana y Ana Villa, las hermanas creadas por Lope de Vega se pasean maléficas y brillantes, entre remotas y actuales, por el escenario del Español; y así lucen no porque vistan zapatos acharolados o una brisita del nuevo milenio se asome. No, no. Lucen así porque Lope las pensó así: puñeteras. En esta coproducción entre el propio teatro, la Fundación Siglo de Oro y Pentación, actúan también Emilio Buale, Javier Collado, Julio Hidalgo, Pablo Vázquez, Alejandra Mayo, Jesús Teyssiere, José Ramón Iglesias, Jesús Fuente, Mario Vedoya y Jorge Gurpegui.

Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.