Publicado: 31/07/2016 04:00
Fue un bombazo. La noticia saltó a las cabeceras de los diarios y webs la mañana del día 31 de julio de 2015 cuando las autoridades francesas del servicio de Aduanas interceptaron el velero propiedad del exbanquero Jaime Botín. Dentro de la embarcación viajaba un cuadro de Pablo Picasso. Cabeza de mujer joven (1906). El velero, que provenía de Valencia, tenía bandera británica y permanecía amarrado en el puerto deportivo de Calvi desde hacía unos días. El itinerario de navegación apuntaba en dirección Suiza, destino final, donde estaba previsto el traslado del lienzo por vía aérea. Nada de eso hubiese sido extraordinario ni habría motivado la intervención de la policía, de no ser un por un detalle. La obra tenía una prohibición de salida de España: había sido considerada Bien del Patrimonio Cultural Español. Sacarla del territorio sin autorización constituye un delito de contrabando.
La polémica del Botín tiende a desdibujarse. Se habla poco de ella en los medios y en las implicaciones que tiene
Apenas unos meses antes del episodio, ante la solicitud del propio Jaime Botín, la Junta de Calificación, Valoración y Exportación de Bienes del Patrimonio Histórico Español había negado el permiso de salida de la obra. Cabeza de mujer joven había sido calificada claramente como inexportable. Según determinaron los especialistas, no existía ninguna pintura con características similares en España, ya que se trataba de una pieza clave en la evolución de la obra de Picasso (es uno de los pocos ejemplares del llamado periodo de Gósol). Sobre la base de este razonamiento, su propietario, Jaime Botín, no podía –por imperativo legal– disponer de ella sin autorización del Estado. Sin embargo, Botín hizo todo lo contrario. Según establece la Ley de Patrimonio Histórico, la exportación sin autorización de un Bien del Patrimonio Cultural Español constituye un delito si se supera el valor de 18.000 euros. Cabeza de mujer joven está valorada en algo más de 26 millones de euros. Hay, por tanto, indicios más que suficientes.
La polémica del Botín tiende a desdibujarse. Se habla poco de ella en los medios y en las implicaciones que tiene. El sumario del caso, abierto en el juzgado número 4 de Pozuelo de Alarcón (Madrid), incorporó en octubre de 2015 pruebas aportadas por los agentes de la Unidad Central Operativa (UCO), el grupo de élite del la Guardia Civil, que aportó un informe que echa por tierra la principal coartada esgrimida por la defensa de Jaime Botín para exigir la devolución del cuadro 'Cabeza de mujer joven'. Los abogados de Botín habían defendido hasta ahora que el lienzo no había estado jamás en España y que la embarcación en el que estaba depositado de manera permanente, el 'Addix', navega bajo bandera británica. Ahora, la Guardia Civil ha encontrado pruebas que confirman que el célebre cuadro, declarado Patrimonio Cultural Español e "inexportable", estuvo en Madrid y, por tanto, fuera del barco con cuya 'nacionalidad' Botín quiere blindar su millonario lienzo.
La vía judicial para esclarecer el presunto delito de contrabando se ha visto enlentecida por el hecho de que el cuadro es propiedad de una sociedad radicada fuera de España (en Panamá)
La vía judicial para esclarecer el presunto delito de contrabando se ha visto enlentecida por el hecho de que el cuadro es propiedad de una sociedad radicada fuera de España (en Panamá). Se trata de Euroshipping Charter Company Ltd, cuyo presidente, según los datos de la ficha del registro, es Paul Saurel, directivo del Banco Santander, quien, según información adelantada por Vozpópuli, estuvo vinculado al entramado de sociedades en este país centroamericano y en las Islas Vírgenes Británicas con las que Emilio Botín y algunos miembros de su familia –entre ellos el propio Jaime, su hermano menor- desviaron más de 2.000 millones de euros y por los que se vieron obligados a regularizar 211 millones con Hacienda en 2010. De momento, solo hay dos cosas claras: el lienzo permanece en manos del Estado, custodiado por el personal del Museo Reina Sofía, y la investigación avana con tal lentitud que parece prácticamente paralizada. Muchas preguntas quedan en el aire: ¿Por qué ha tardado tanto en llegarse a una solución? ¿Ha sido adecuada la estrategia del banquero? ¿Perderá definitivamente una obra que es suya? ¿El cuadro es o no es español? ¿Puede servir de precedente para nuevos casos de este tipo? He aquí algunas de las interrogantes básicas alrededor de un episodio en el que nadie mueve ficha.
¿Por qué se enlentece tanto la investigación? Una de las primeras dudas que todavía quedan alrededor del Picasso de Botín es: ¿por qué ha sido tan engorrosa y lenta investigación? Hay varias razones que explican porqué hay tantas dobleces tanto en la investigación como en la estrategia de defensa. A los pocos días de que la obra fuera confiscada por las autoridades francesas y viajara a España para ser custodiada mientras se concluían las investigaciones, los abogados de Botín apostaron por una estrategia muy clara de defensa. Según ellos, Cabeza de mujer joven "no está declarada como bien perteneciente al Patrimonio Histórico Español". Los abogados escogieron tres argumentos para eludir lo que la ley señala como delito: que el cuadro no es español, tampoco se encontraba en España y que no fue Jaime Botín sino Christie’s la que solicitó el permiso de exportabilidad en 2012.
¿El cuadro es de Botín o de una Sociedad radicada en Panamá? A eso se sumaba un detalle más: el cuadro aparece como propiedad de una sociedad radicada fuera de España. En concreto, en Panamá: Euroshipping Charter Company Ltd, cuyo presidente, según los datos de la ficha del registro, es Paul Saurel, directivo del Banco Santander, quien, según información adelantada por Vozpópuli, estuvo vinculado al entramado de sociedades en este país centroamericano y en las Islas Vírgenes Británicas con las que Emilio Botín y algunos miembros de su familia –entre ellos el propio Jaime, su hermano menor- desviaron más de 2.000 millones de euros y por los que se vieron obligados a regularizar 211 millones con Hacienda en 2010. Creada en septiembre de 1998, Euroshipping Charter Company INC es una sociedad distinta de Cherokee Bay Limited, radicada en la isla de Guernsey, y a nombre de la cual figura 'Addix', el barco de bandera británica dentro del cual viajaba Cabeza de mujer joven. Fue justamente cuando se trasladaba rumbo a Suiza para la venta del lienzo cuando fue interceptada en Córcega por las autoridades francesas. Los motivos eran más que claros: la Audiencia Nacional había prohibido apenas un mes antes -en mayo de 2015- la salida de España del cuadro, confirmando así la negativa del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, cuando, en 2012, aseguró que se trataba de una obra "no exportable".
¿Cuál es el recorrido exacto del Picasso? ¿Es español o no el cuadro? Jaime Botín solicitó –a través de la casa de subastas Christie’s- a finales de 2012 autorización para exportar la obra, sin embargo la Junta de Calificación, Valoración y Exportación de Bienes del Patrimonio Histórico Español denegó su exportación y la declaró expresamente inexportable por ser de excepcional importancia para el patrimonio histórico común, por no existir ninguna obra semejante en España y ser pieza clave en la evolución de la obra de Picasso. Es por ello que la defensa insiste en que fue casa de subastas Christie's Ibérica la se dirigió a la Secretaría de Estado de Cultura para trasladar la obra a la capital británica. La historia comienza mucho antes. Botín adquirió la pintura en enero de 1977, procedente de la Marlborough Fine Art de Londres con destino a su colección particular en España. Ese era el punto de partida de los abogados para defender la no declaración de la obra como patrimonio español. Los letrados, aseguraban, que el cuadro había sido “pintado en el extranjero, comprado en extranjero y que allí ha tenido siempre su domicilio permanente”, en alusión al barco (de bandera británica), donde se encontraba. A partir de ese razonamiento, los abogados aseguraban: "Por lo tanto, el cuadro no ha podido ser exportado ni lícita ni ilícitamente". Asimismo, defiende que el cuadro tiene nacionalidad británica al encontrarse "permanentemente a bordo de un barco de nacionalidad británica, que es territorio extranjero a todos los efectos incluso cuando toca puertos españoles".
¿Si el cuadro es de Botín, por qué no puede venderlo? "No hay ninguna posibilidad de que el Gobierno español pueda tener éxito, porque no tiene derecho. El cuadro es de mi propiedad. Es como si mañana fuesen a mi casa de Madrid y dijeran: 'Nos gusta esta obra de arte'”, dijo Jaime Botín al diario The New York Times en una entrevista concedida en octubre de 2015 . Según establece la Ley de Patrimonio Histórico, la exportación sin autorización de un bien del Patrimonio Cultural Español constituye un delito de contrabando si se supera el valor de 18.000 euros. Cabeza de mujer joven está valorado en algo más de 26 millones de euros. Hay, por tanto, indicios más que suficientes que señalan que Botín ha incurrido presuntamente en un posible delito de tráfico ilícito. Tras la solicitud del permiso de exportación en 2012, la Junta de Calificación, Valoración y Exportación de Bienes del Patrimonio Histórico Español denegó la autorización con el apoyo por el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte. Esta resolución fue recurrida por los propietarios ante la Audiencia Nacional, que confirmó la prohibición de sacar el cuadro de España y avaló la decisión adoptada por el Ministerio. La sentencia de la Audiencia fue recurrida ante el Tribunal Supremo. Sin embargo, las medidas cautelares impuestas por la Audiencia imposibilitaban la salida del cuadro de las fronteras españolas. Esa fue la razón por la cual la obra fue trasladada, en calidad de depósito judicial, al Museo Reina Sofía de Madrid, donde todavía permanece.
¿De qué forma la UCO echó por tierra la coartada de Botín? Todo estaba más atado de lo que parecía. Los agentes de la Unidad Central Operativa (UCO), el grupo de élite de la Guardia Civil, entregaron en 2015 al titular del Juzgado de Instrucción número 4 de Pozuelo de Alarcón (Madrid) que investigaba al financiero por un posible delito de contrabando, un informe que echaba por tierra la principal coartada esgrimida por éste para exigir la devolución del cuadro Cabeza de mujer joven. Los abogados de Botín habían defendido hasta ahora que el lienzo no había estado jamás en España y que la embarcación en el que estaba depositado de manera permanente, el 'Addix', navega bajo bandera británica. En el documento acreditaro, la Guardia Civil aportaba pruebas que confirmaban que el célebre cuadro, declarado Patrimonio Cultural Español e "inexportable", estuvo en Madrid y, por tanto, fuera del barco con cuya 'nacionalidad' Botín quiere blindar su millonario lienzo. Según los abogados del banquero, el lienzo no había pisado jamás España, ya que permanecía en el 'Addix', barco de bandera británica. La UCO ha constatado que el lienzo salió de éste y estuvo en Madrid. Según establece la Ley de Patrimonio Histórico, la exportación sin autorización de un bien del Patrimonio Cultural Español constituye un delito de contrabando si se supera el valor de 18.000 euros. Cabeza de mujer joven está valorado en algo más de 26 millones de euros. Fue esa la razón que llevó a la UCO a poner en marcha las investigaciones y a proceder –gracias al trabajo conjunto con las autoridades francesas- en julio de este año a abordar el barco amarrado en el puerto deportivo de Calvi, en la isla de Córcega, donde se encontraba la pieza. Los registros portuarios permitieron comprobar que el 'Addix' había permanecido amarrado con anterioridad en el Real Club Náutico de Valencia hasta el mes de junio y en el de Menorca antes de llegar a la costa de la isla francesa el 10 de julio. Una vez en territorio francés, la obra iba a viajar vía aérea a Suiza para su supuesta venta.
Titulo
¿quién es jaime botín?Jaime Botín-Sanz de Sautuola García de los Ríos (Santander, Cantabria, 20 de abril de 1936) es un banquero español. Fue presidente de Bankinter entre 1986 y 2002. Hermano menor del fallecido presidente del Santander Emilio Botín. Fue sancionado por la justicia al esconder que su participación real en Bankinter era de casi el 23% y no del 16,3% declarado. Es poco lo que se sabe de la vida personal del ex banquero. Se trata de un hombre discreto, poco dado a las apariciones públicas y las fotografías en público. Aficionado a la navegación, disfruta del teatro y de la la filosofía, a cuyo estudio ha dedicado buena parte de su tiempo. Amante de la poesía, la música y la cultura en general, es licenciado en Derecho y Ciencias Económicas por la Universidad de Deusto y domina a la perfección varios idiomas.
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