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Cultura

Rock, electrónica, fútbol y puesta de sol en el festival fusión de Ibiza

El Bacardí Ibiza123 ha arrancado a mediodía en la localidad ibicenca de Sant Antoni de Portmany con la actuación de DJ Pippi, cuya música ha comenzado a congregar a los primeros espectadores en el césped artificial del festival que quiere reivindicar un nuevo género, el "rocktronic".

La primera edición de esta cita cuenta con estrellas de la talla de Sting, Elton John y Lenny Kravitz, que se han prestado a convertir el escenario en un gran laboratorio musical combinando sus melodías en directo con las "enlatadas" de algunos de los pinchadiscos más famosos del mundo.

Es el experimento del "rocktronic", que mañana fusionará las baladas de Elton John con los sonidos del pinchadiscos australiano Pnau y el martes pondrá en el tubo de ensayo el rock-funk de Lenny Kravitz con los temas de Luciano.

Así lo ha explicado hoy a Efe el promotor del Bacardí Ibiza123 Festival, Pino Sagliocco, quien puso en marcha el proyecto aconsejado por un dj y pensando en el pasado rockero de la isla.

Sagliocco recuerda las visitas a la isla de Pink Floyd o Velvet Underground en los años sesenta del siglo pasado, de Eric Clapton y Bob Marley en los setenta y de James Brown y Duran Duran una década después, así como el concierto de Freddie Mercury y Monsterrat Caballé fusionando rock con ópera en 1987 con su famoso "Barcelona".

El promotor describe el festival como "una fusión de dos mundos que se encuentran para que nazca un nuevo movimiento": "En el futuro no va a ser solo rocktronic: habrá poptronic, indietronic... Creo que va a ser una manera de que el mundo perciba la música, sin olvidarnos de la raíz, el rock", añade.

Hoy se espera la actuación estelar de Sting, única cita en España este año del británico, quien ha accedido a posponer su concierto hasta después de la final de la Eurocopa.

Así, a las 20.45 horas, la música electrónica que suena sin descanso desde el mediodía en el macroescenario del festival dejará paso a los gritos de los aficionados, que podrán ver el partido en dos pantallas gigantes.

La que pretende ser la cita musical ibicenca más importante del año se ubica en uno de los sitios más privilegiados de la isla, codo con codo con el famoso Café del Mar donde los hippies instauraron la tradición de contemplar el atardecer.

Con el mar de fondo y acceso a la playa, los amantes de la música electrónica, protagonista de todos sus conciertos salvo los tres cabezas de cartel, van entrando poco a poco en sus instalaciones en un día que el sol está dando tregua tras una semana de calor sofocante y que acabará con las sesiones de David Guetta y Tiesto.

El recinto del festival cuenta con varias zonas VIP, mercadillo, coches de choque y hasta un espacio de masajes, que se van animando a medida que pasa el día y en el que ya se ven algunos aficionados con la bandera española.

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