Publicado: 31/10/2012 04:00
Omar Jerez es un artista que sabe cómo y cuándo ser visto. Metió un general Franco de cera en un frigorífico en la Feria ARCO; se encargó entonces, y muy bien, de tanto los medios de comunicación lo sacaran en todos lo sacaran en todos los telediarios como de que la Fundación por la Memoria de Francisco Franco lo demandara. A medio camino entre la provocación y el espectáculo, sus instalaciones y performances jamás escapan a la atención mediática.
Granadino del barrio de Fígares, nació un 13 de noviembre de 1980 y estudió en el Ave María de la Cuesta del Chapiz. Se autodefine como "una persona de estados extremos". Su madre es judía y su padre palestino, explica. "Esta condición cultural ha marcado en mí una forma de pensar y actuar en todo lo que hago en mi vida y en mi pensamiento", cuenta Jerez a el Ideal.es.
Ahora, Omar Jerez tiene otro tema en mente. A partir del próximo 29 de noviembre realizará en Madrid, una representación del secuestro del funcionario de prisiones José Ortega Lara a manos de ETA entre 1996 y 1997. Jerez permanecerá ocho días en una recreación del zulo, que podrá ser visitada por el público y en la que se mostrará el progreso de su estado a través de una retransmisión en tiempo real a través de videocámaras.
El comisario de la performance, Christian Domínguez, informa que el artista granadino busca "un paralelismo sui géneris entre su propia vida y la del secuestrado durante casi un año y medio por ETA". Con estoel artista pretende, explica el comisario, crear "un encontronazo con la ley que ha permitido la liberación de Josu Uribetxebarria Bolinaga por ser enfermo terminal, pero que no deja de ser un asesino" y, a su vez, se solidariza con "las víctimas inocentes producidas por cualquier organización terrorista".
Omar Jerez ha elegido el caso de Ortega Lara porque su padre, palestino, fue reclutado a los 18 años por un comando de la guerrilla palestina contra Israel para asesinar judíos y su hermana a los cinco años fue secuestrada por un comando de su propio padre durante dos años, en los que Omar y su madre, judía sefardí originaria de Granada, perdieron el rastro de la menor.
En declaraciones recogidas en el diario ABC, Omar Jerez afirmó sobre la performance que está por realizar: "Lo del secuestro de Ortega Lara me marca porque si yo me encontrara en una situación como él estoy seguro que me moriría. No hubiera podido aguantar 532 días. Imposible para mi sensibilidad y fortaleza psicológica".
El videoartista explicó que su idea es "en primer lugar denunciar este tipo de actos y en segundo situarse en el estado en el que vivió Ortega Lara. Necesito sentir mínimamente lo que padeció porque Ortega Lara, para mí, es un ejemplo de superación y lo que quiero con esta 'performance', ante todo, es concienciar al público", explicó.
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