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Motor

El 32% de los accidentes con víctimas son por distracciones del conductor: el 28% por velocidad inadecuada

Imagen de archivo de un accidente de tráfico,

La III Jornada sobre Tecnología y Seguridad Vial, organizada por RTVE, FESVIAL y Fundación ONCE han analizado los riesgos en la seguridad vial y tecnologías disponibles y futuras para evitarlos. El principal riesgo para la seguridad vial, según los participantes es el factor humano. Según datos de la DGT, durante 2017 de entre los accidentes con víctimas mortales, el 32% están relacionados con distracciones del conductor. El 12% con cansancio, el 28% por velocidad inadecuada, y en menor porcentaje con consumo de drogas y alcohol.

Otro de los factores claves es aumento de la edad media del parque móvil español. La edad media de los vehículos implicados en accidentes con víctimas durante el 2017 ha sido de 12 años. De acuerdo a datos de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC), más de 7 millones de coches tienen más de 10 años.

De acuerdo con los participantes en la jornada organizada por FESVIAL, el desarrollo del coche autónomo será un punto de inflexión en cuanto a seguridad vial, pero para su estandarización aún queda mucho por hacer. Sin embargo las tecnologías ADAS (sistemas avanzados de asistencia a la conducción) ya son una realidad y son claves a la hora de reducir accidentes relacionados con el factor humano.

El envejecimiento de los vehículos ya afecta a la seguridad vial. El problema principal de estos automóviles es la falta de tecnología de prevención de accidentes que ya llevan integrada los vehículos nuevos. En países como Israel ya es obligatoria para ciertos vehículos.

Pero esa carencia de tecnología es solucionable. Según Elías Izquierdo, Responsable de Mobileye en España, “Es imprescindible renovar el parque de automóviles a vehículos que dispongan de la última tecnología. Aunque también existe la posibilidad de instalar sistemas ADAS en vehículos que no dispongan de ellos con unos costes muy reducidos, y de esta manera hacer las carreteras más seguras para conductores, pasajeros, ciclistas o peatones”. Según un estudio de la Dirección General de Tráfico, la incorporación de esta tecnología a la flota de vehículos podría haber evitado o mitigado 4.000 atropellos el último año, reduciría un 54% los accidentes por colisión frontal y podría haber evitado 19.000 siniestros relacionados con salidas involuntarias de carril.

Hay que seguir impulsando la concienciación en cuanto a los hábitos de conducción prudente, que se combine con las herramientas que ofrece la tecnología para llegar a ese objetivo de llegar a 0 víctimas mortales.

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