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Motor

La antigüedad media de los coches involucrados en accidentes mortales hasta junio supera los 14 años

Una situación que preocupa mucho a la Dirección General de Tráfico, motivo por el cual ha incluido en el calendario anual de campañas una nueva dedicada exclusivamente a la vigilancia de las condiciones de los vehículos que circulan por las carreteras, y que se desarrollará hasta el próximo domingo 17 de julio. 

Durante estos días, los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil y el resto de policías locales y autonómicos que se sumen a la campaña prestarán especial atención al adecuado mantenimiento y puesta a punto de todos los elementos de seguridad del vehículo: neumáticos, frenos, luces, señalización, parabrisas sin daños. 

Según el último estudio realizado por Tráfico, el riesgo de fallecer o sufrir una lesión con hospitalización aumenta con la antigüedad del vehículo. En comparación con los turismos de hasta 4 años, el riesgo de fallecimiento es 1,6 veces superior en los turismos de 10 a 14 años y 2,2 veces superior en los turismos de 15 a 19 años. Teniendo en cuenta esta relación entre riesgo y antigüedad del vehículo, el mantenimiento adecuado de todos los elementos de seguridad se convierten en una actividad imprescindible para combatir la siniestralidad.  

Y es que, por ejemplo, según datos de la DGT, aproximadamente más de un millón de los vehículos, un 5% , circulan con defectos graves en las ruedas, principalmente por llevar una profundidad del dibujo por debajo del mínimo legal o por tener un desgaste irregular debido a una mala suspensión o una alineación incorrecta y circular con una presión errónea. En España, en los seis primeros meses de este año, el 4% de los vehículos implicados en accidentes mortales tenían la ITV caducada

Como sucede en otras ocasiones,  la Asociación de Lesionados Medulares y Grandes Discapacitados Físicos (ASPAYM) colabora con la DGT concienciando a los conductores sobre el grave riesgo que supone circular con un vehículo en mal estado. Para ello, personas voluntarias  con lesión medular víctimas de un accidente de tráfico acompañarán a los agentes de tráfico encargados de realizar los controles. En ese momento, el voluntario de ASPAYM se acercará al vehículo retenido, trasladándole el mensaje común de la campaña y demostrando al mismo tiempo con su presencia, las consecuencias y secuelas irreversibles de los accidentes de tráfico. 

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