Quantcast

Sociedad

IUy ERC piden explicaciones parlamentarias sobre los gastos del viaje del Rey a Botsuana

Imagen del Rey en la web de Rann Safaris que la compañía ha retirado tras el escándalo

La Casa Real ha asegurado que el viaje en el que el Monarca se ha roto la cadera ha sido un “viaje privado sin coste para el erario público”. Pero lo que pretendía ser una línea de defensa contra las acusaciones de despilfarro se ha convertido en boomerang político que se vuelve contra la Corona ya que siembra la duda de quién financia los gastos del Rey y cómo se gasta el dinero que rodea a la Corona. Hasta tal punto que los grupos de la izquierda parlamentaria preparan preguntas públicas para aclarar quién paga al Rey sus viajes y qué dinero privado entra en la Casa Real.

Es "peor todavía" que una compañía pueda financiar viajes de una institución como la Corona, denuncia Llamazares

El diputado de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, sostiene que el pago privado de ese viaje es “peor todavía” ya que siembra las dudas de qué dádivas y regalos recibe el Monarca. “Es preferible que se conozca quién paga a que queden dudas de que una compañía o parque natural pueda ‘alquilar’ al Rey para promocionarse”, ha asegurado a Vozpópuli.

Tanto Izquierda Unida (IU) como Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) preparan preguntas parlamentarias para averiguar “con qué consignación presupuestaria” se ha financiado el viaje.

Una factura de 250.000 euros

Según revelan fuentes parlamentarias, Don Juan Carlos no viajó solo a Botsuana sino que le acompañaban cinco personas más entre las que había dos escoltas. Ese viaje requirió fletar un vuelo chárter y el pago de tres cupos para la caza de elefantes. Según esas fuentes, el coste del viaje pudo rondar los 200.000 euros. La Casa Real, que asegura que los gastos no se han cargado al erario público, no ha aclarado sin embargo quién pagó esa cantidad.

La Casa Real no ha querido detallar la financiación del viaje ni tampoco quiénes fueron los acompañantes del monarca con el argumento de que se trata de una actividad “privada” de Don Juan Carlos.

Iniciativas parlamentarias casi abocadas al fracaso

Tradicionalmente, todas las iniciativas parlamentarias que afectan a la Casa Real han terminado en nada. La maniobra parlamentaria del grupo mayoritario suele ser la de no calificar las preguntas que llegan a la Mesa de Portavoces. Así, esas iniciativas quedan “adormecidas” indefinidamente. En los últimos meses, sólo una iniciativa para definir la condición jurídica de Corona ha sido tenida en cuenta. “Todas las preguntas nos las han parado”, protesta Gaspar Llamazares, que denuncia “la complicidad del PSOE”.

La Mesa del Parlamento suele no calificar las preguntas sobre la Corona que quedan así atascadas indefinidamente

El Gobierno argumenta tradicionalmente que no puede dar trámite “a cuestiones que no afectan a los grupos de la Cámara sino a terceros”, según fuentes parlamentarias. Así que la cuestión ahora que decidirá si se investiga o no cómo se ha financiado el viaje del Rey es la posición del Partido Socialista, que suele abstenerse en estas cuestiones pero que no se ha manifestado en esta ocasión apelando a la "responsabilidad institucional". Sólo el líder de la oposición madrileña, Tomás Gómez, criticó ayer al Monarca al que emplazó a "elegir entre las obligaciones y las servidumbres de las responsabilidades públicas y una abdicación que le permita disfrutar de una vida diferente".

Protesta ecologista

También los grupos ecologistas han levantado la voz a raíz de la cacería del Monarca. Ecologistas en Acción prepara iniciativas para trasladar públicamente su rechazo y otros grupos piden al Rey que renuncie a la presidencia de la organización ecologista WWF-ADENA.

Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.