Quantcast

Sociedad

Indignación en Reus: el desfase de los universitarios del Saloufest genera un vendaval de quejas

Aspecto de la fiesta nocturna de los universitarios británicos que participan en el festival Saloufest, por las calles de Salou

La primera oleada de universitarios británicos del Saloufest, una fiesta que se vende como "la madre de todos los tours", con una "semana llena de deporte loco" y "noches épicas" y se promociona como deportiva pero en la que prima el consumo de alcohol, ha provocado un año más numerosas quejas por incivismo, exhibicionismo y suciedad en las calles de Salou y en el campo de fútbol de Reus.

Los 4.600 estudiantes británicos apuran sus últimas horas en Salou -se van este jueves- con la rutina de siempre: meterse en el cuerpo la mayor cantidad posible de alcohol en el menor tiempo posible. Tres días de festival, que se divide en dos tandas, antes y después de la Semana Santa, para no alterar los días fuertes de turismo familiar, han dejado las habituales imágenes de jóvenes disfrazados, exhibicionismo y consumo excesivo de alcohol, si bien no en la calle porque lo impiden varios monitores que vigilan a los jóvenes y los propios locales de ocio.

"Cada año es lo mismo: vienen, se disfrazan, hacen el burro, enseñan el culo y se emborrachan. No son conflictivos, pero no los queremos por aquí, son cutres", resume el portero de un local, que ahuyenta a los "saloufiesteros" en la entrada.

Para ellos, ya existen los locales que les reciben con los brazos abiertos, señalizados incluso en la entrada para que la noche no les confunda, entre las calles Carles Buigas, Montblanc y la avenida de Andorra. La idea es que, de noche, los ingleses pisen poco la calle, que se encierren en sus hoteles y de allí a los bares, pero el teletransporte no existe y es inevitable que transiten por la vía pública cuando van de un sitio a otro. "El cliente español también bebe y es ruidoso, pero como no se disfraza pasa más desapercibido; bienvenidos sean los guiris porque el invierno es muy largo", señala el portero de uno de estos locales, que bendice Saloufest con chupitos muy baratos.

"Cada año es lo mismo: vienen, se disfrazan, enseñan el culo y se emborrachan", dice el portero de un bar

Los disfraces llaman la atención por la inmensa cantidad de culos que dejan al aire: cocineros vestidos sólo con el delantal, sábanas que simulan togas o directamente tangas para no complicarse la vida. "Nosotros venimos cada año a ligar, cuando las inglesas van cocidas van a lo que van", confiesan dos chicos de Tarragona, sentados en una terraza mientras calibran escotes, muslos y ombligos de conejitas, enfermeras y superheroínas que empiezan la noche.

Arrasan el estadio del Reus

En las 15 ediciones del festival, que se sepa, no se han registrado peleas importantes ni grandes destrozos de mobiliario urbano. Sin embargo, este lunes algunos de los universitarios inscritos en la actividad de fútbol se desplazaron al municipio vecino de Reus, donde en lugar de practicar deporte se dedicaron a beber alcohol en la hierba e incluso algunos corrieron desnudos por la hierba. Unos actos que han llevado al alcalde de Reus, Carles Pellicer (CiU), a prohibir la utilización del estadio municipal de la ciudad durante los días del festival, como recoge el diario La Vanguardia, tras quejarse a la empresa municipal Reus Esport y Lleure (Reus Deporte y Ocio), que firmó el contrato con Sol Active Tours, empresa "touroperadora! en España del Saloufest.

Las quejas del club de fútbol se centran sobre todo en el impacto en la hierba del campo, que ya estaba en mal estado, y en la mala imagen que se ofrece del lugar, ya que han difundido fotos en las redes sociales de un recinto sucio con vasos y botellas, y de jóvenes bebiendo o corriendo desnudos.

El ayuntamiento, en un comunicado, informa de que han exigido que "se acentúe el control de los participantes para evitar nuevos episodios de incivismo". El alcalde de Reus, Carles Pellicer (CiU), señala que el acuerdo con la empresa promotora de Saloufest es para usos "exclusivamente" deportivos.

Impacto de 5 millones

El gerente de Sol Active Tours, Doreen Straatman, en declaraciones a la agencia Efe, asegura que los incidentes fueron "un hecho puntual" y ha asegurado que trabajan en colaboración con la policía y con los ayuntamientos ya que se trata de dar cabida a "4.600 estudiantes de golpe". Hasta el 18 de abril, con el paréntesis de los días fuertes de Semana Santa, participarán en el Saloufest 9.500 estudiantes de más de un centenar de universidades británicas. El impacto económico que generan es de 5 millones de euros y hoteles, bares y tiendas los ven como un mercado más (los nueve aparthoteles donde se alojan solo abren para ellos).

El Ayuntamiento de Salou recuerda que se trata de una iniciativa privada y que no influye en la marca de turismo familiar

El precio del festival es de unos 360 euros de media y mientras bares y hoteles lo aplauden porque ayuda a avanzar la temporada, los vecinos se quejan de ruido, suciedad e imágenes de descontrol. Por su parte, el Ayuntamiento de Salou recuerda que se trata de una iniciativa privada y que no influye en la marca de turismo familiar de la llamada, simbólicamente, capital de la Costa Dorada. 

Al margen de los incidentes en el campo de fútbol, en las dos noches que llevan en Salou, no se han registrado más desencuentros, aunque sí se han repetido las quejas de los vecinos de la zona de la calle Carles Buigas, que concentra los locales de ocio nocturno del municipio. "Si tanto les gustan, que se los lleven a su casa, esto no es turismo, es una vergüenza y ya no llamo ni a la policía porque ni vienen", expresa un vecino.

Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.