Hosteleros y vecinos de Salou, enfrentados por la llegada de 9.500 universitarios británicos al Saloufest

Vuelven los universitarios británicos a Salou y con ellos la polémica que en los últimos años ha rodeado el SalouFest, un festival deportivo en el que participarán 9.500 personas. El SalouFest que empieza este lunes y durará hasta el 14 de abril, ofrece a los estudiantes de universidades británicas e irlandesas la oportunidad de participar durante dos días en 25 disciplinas deportivas diferentes. Sin embargo, los vecinos de la localidad denuncian que en realidad los jóvenes acuden al municipio a emborracharse y que su comportamiento en la calle deja mucho que desear y una imagen deplorable de Salou.

Los hoteleros de la zona, en cambio, hacen una valoración muy positiva del Saloufest ya que “ayuda a desestacionalizar” el turismo en la zona y genera puestos de trabajo en temporada baja. De hecho, la Asociación Hotelera de Salou-Cambrils-La Pineda ha asegurado a Europa Press que el festival ha generado unos 1.500 puestos de trabajo, entre directos en los hoteles e indirectos en restauración y otros servicios. Además, la asociación recuerda que este año coinciden el SalouFest y la Semana Santa, lo que “dinamiza la economía” de Saloy y de los municipios próximos. Para respaldar esta afirmación, los hoteleros aseguran que entre 2.500 y 3.000 trabajadores se han dado de alta en la Seguridad Social.

Fiestas

Los universitarios pagan unos 230 euros por una estancia de cuatro días en la Costa Daurada, en lo que la empresa que gestiona las reservas califica como “la mejor semana” de sus vidas. En la página web donde se hacen las reservas, la compañía también ofrece, además de transporte y alojamiento, una noche de fiesta en la discoteca Pachá de La Pineda.

Los primeros 4.000 estudiantes llegaron a Catalunya este domingo y estarán en Salou hasta este jueves; entre el 2 y el 6 de abril llegarán 4.500 más, y los últimos 1.000 estarán en la Costa Daurada entre el 9 y el 13 de abril.

El Saloufest ha recibido críticas en los últimos años debido a las fiestas nocturnas de los estudiantes, sobre todo desde 2010 a raíz de la denuncia de una estudiante por un presunto abuso sexual de un joven de su grupo durante su estancia en Salou.