Cientos de emigrantes que vivían en el Gurugú, en Melilla, se han desplazado para llegar a España por Ceuta

Cientos de emigrantes que hasta hace algunas semanas permanecían en el Monte Gurugú para pasar a Melilla se han trasladado hasta la frontera de Marruecos con Ceuta tras el incremento de la vigilancia de la valla en esa zona. El propio delegado de Gobierno en Melilla, Abdelmalik El Barkani, reconoció a este periódico que en la actualidad hay muchos menos emigrantes en la zona intentando pasar a España.

Hace algunos días se produjo un incendio en las faldas del Gurugú. La gendarmería marroquí detuvo a siete emigrantes a los que acusó de quemar el monte para intentar distraer a la policía y saltar la valla que separa Marruecos de Melilla. La Delegación de Gobierno, que dirige Abdelmalik El Barkani tiene información de que en la actualidad podría haber entre 300 y 400 personas intentando pasar desde Marruecos a Melilla.

“Esta situación se produce después de que hace algún tiempo hubiéramos tenido miles, con días en los que han entrado entre 300 y 400 personas y había centenares esperando en la frontera”, afirma el delegado. Algunas fuentes indican que estos subsaharianos han buscado puntos más fáciles para entrar en Europa, como puede ser la vía de Libia, pero otros han preferido trasladarse de Melilla a Ceuta buscando pasar por la valla o por mar.

Los emigrantes pagan a las mafias 1.200 € por pasar en el doble fondo de un vehículo, 300/400 euros por un viaje en patera y de 500 a 1000 euros por el ‘alquiler’ de un pasaporte marroquí

“No sabemos exactamente cuántos se han podido ir en aquella dirección, -afirma el delegado- pero lo que si tengo claro es que los años en los que Melilla ha sido noticia importante, Ceuta estaba más tranquila y ahora Ceuta está con mas pateras y más saltos a la valla que nunca”. Abdelmalik El Barkani señala que las mafias actúan con estas personas desde que salen de su país hasta que llegan a Europa e incluso también en el continente. Les integran en mafias de ‘top manta’ y prostitución que están al mando de redes francófonas y nigerianas.

Estos grupos de emigrantes pagan a las mafias 1.200 euros por pasar en el doble fondo de un vehículo, 300/400 euros por un viaje en patera y de 500 a 1000 euros por el ‘alquiler’ de un pasaporte marroquí. El delegado en Melilla está satisfecho con el entendimiento actual con Marruecos, que parte de la buena relación personal entre los dos ministros del Interior. Este ambiente se traduce en una colaboración conjunta en el control de la emigración “porque ante los mismos problemas se han buscado soluciones”.

Abdelmalik El Barkani reconoce que la crisis ha provocado un importante aumento de la población en la ciudad. Muchos marroquíes que tenían su situación regularizada en España han preferido venir a Melilla a vivir en vez de volver a su país. Esta situación también se ha producido con algunos melillenses que trabajaban en la península y que han perdido su trabajo. Han preferido volver a su casa. Esta situación ha provocado en unos cinco años un aumento de la población de cerca de diez mil personas, según el delegado de Gobierno.