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Sociedad

La retirada de un avispero termina con una pared derrumbada y una mujer herida grave en el hospital

Imagen de un avispero.

La explosión del gas del espray empleado para acabar con un nido de avispas velutinas (asiáticas) dejó una mujer herida y una fachada destrozada en el municipio de Bergondo (La Coruña). La víctima, que se encontraba en la sala de estar acabó atrapada entre los escombros. La mujer permanece estable y fuera de peligro, aunque mantiene pronóstico reservado.

El hijo relata a La Voz de Galicia que la pared "explotó como una bomba" y que tuvo que apartar ladrillos para sacarla de la estancia. Todos los muebles que se encontraban pegados a la pared también acabaron por el suelo y cree que los daños sufridos por su madre podrían haber sido mayores, ya que algunos de los estantes son pesados.

La peculiar historia tiene su origen en la llamada que hizo esta vecina al 112 de Galicia, después de percatarse de la presencia de las avispas en la caja de la persiana de una de las estancias de la casa. Enviaron incluso fotos y un técnico de la empresa pública Tragsa se desplazó hasta el domicilio para eliminar el avispero.  

Roció el exterior de la fachada con el gas venenoso y, como creyó que las avispas habían anidado en la cámara de aire de la pared, decidió rociar también por dentro. 

Fuentes cercanas a la investigación citadas por el diario gallego argumentan que "el gas, que es altamente inflamable, se acumuló en una de las celdas del nido. La detonación se produjo probablemente por un cortocircuito". Lo cierto es que el gas de este espray conlleva peligro ya que en contacto con el fuego puede generar una gran llamarada y la chispa de un cable en mal estado puede provocar una gran detonación como la ocurrida en Bergondo.

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