Publicado: 01/07/2015 04:00
El pacto que alcanzaron el Partido Popular y Ciudadanos para que Cristina Cifuentes pudiera ser investida como presidenta de la Comunidad de Madrid, incluye algunos párrafos en letra pequeña con los que ambos partidos quieren asegurarse que el PSOE y Podemos no tengan opción de dirigir Telemadrid. Pero ese plan de acción exige un cambio en la ley que regula este ente público que, dependiendo de su velocidad de tramitación, podría demorarse durante varias semanas. Incluso hasta después de las elecciones generales. Los socialistas son conscientes de esta circunstancia y quieren aprovecharla, por lo que han exigido a la nueva lideresa madrileña que conforme de inmediato el nuevo Consejo de Administración de la televisión autonómica. De esa forma, se asegurará el control de su línea editorial durante la campaña.
La legislación de esta comunidad autónoma estipula que el Consejo de Administración de Telemadrid debe constituirse inmediatamente después de las elecciones autonómicas. Por lo tanto, las fuerzas políticas deberían proponer en el Pleno autonómico de julio a las personas que quieren que formen parte de este órgano. En concreto, el PP y el PSOE, a 3 cada uno, mientras que Podemos y Ciudadanos, a 2 y 1, respectivamente. Esto daría el control provisional de la cadena a la izquierda y le permitiría, por ejemplo, designar a su director general y a su nuevo responsable de informativos, algo especialmente interesante en los meses previos a las elecciones generales.
El PSOE ha exigido a Cifuentes que el Consejo de Administración de Telemadrid se designe en el próximo Pleno autonómico
Eso sí, para que esto ocurra, la Mesa de la Asamblea de Madrid debería aceptar que este punto se incluya en el orden del día del próximo Pleno. Fuentes del PSOE han asegurado a Vozpópuli que así se lo han reclamado por carta a Cristina Cifuentes y así se lo trasladarán de nuevo en los próximos días. De momento, la presidenta ha ofrecido la callada por respuesta, por lo que los socialistas temen que trate de frenar el nombramiento del nuevo Consejo de Administración. ¿Hasta cuándo? Con toda seguridad, hasta que se certifique el cambio de la Ley Audiovisual madrileña, algo que llevará más tiempo.
Lo que está claro es que, si se materializaran las pretensiones del PSOE, su control de Telemadrid sería temporal, por lo que sus nombramientos de directivos y las decisiones que tomara junto a Podemos, tendrían una cercana fecha de caducidad. Exactamente, hasta que el tándem PP-Ciudadanos cogiera las riendas de la cadena. Lo que ocurrirá más temprano que tarde.
La excusa de la despolitización
Esto será consecuencia de la certera estrategia que Cristina Cifuentes e Ignacio Aguado trazaron entre bambalinas para evitar que la izquierda rija los designios de Telemadrid. Este proyecto contempla una modificación del sistema de nombramiento de los consejeros de la televisión autonómica para que a partir de ahora sean designados -en teoría-, en función de sus méritos profesionales, en lugar de por su pertenencia a un partido político. La intención de la presidenta de la Comunidad de Madrid es que sus candidaturas sólo prosperen si reciben el apoyo de 3/5 partes de la Asamblea autonómica.
El plan maestro de PP y C's también evitará que el PSOE y Podemos cumplan su promesa electoral de readmitir a los 861 trabajadores que fueron despedidos en el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de 2013. Esto supondría un coste estimado de 45 millones de euros anuales para las arcas públicas madrileñas, lo que agravaría los números rojos de esta cadena y obligaría al Ejecutivo autonómico a realizar un esfuerzo presupuestario que ni está dispuesto ni puede hacer.
Fuentes de Ciudadanos han expresado a Vozpópuli que el pacto que alcanzaron con Cifuentes antes de su investidura prevé que el cambio de la Ley Audiovisual madrileña se realice en las próximas semanas. De este modo, pretenden que la izquierda no tome el mando de esta televisión autonómica y no sitúe a sus "comisarios políticos" a la cabeza de su cúpula o de sus servicios informativos.
En cualquier caso, las dos facciones enfrentadas en esta guerra por Telemadrid tienen claro que, pase lo que pase, los hombres fuertes de Esperanza Aguirre e Ignacio González -con Ángel Martín Vizcaíno y Agustín de Grado a la cabeza-, serán fulminados de sus puestos próximamente. También que la línea editorial de la cadena girará hacia el centro, después de unos años en los que ha estado muy escorada a la derecha, algo que ha resultado cómodo para el PP, pero que ha sido muy perjudicial para su share.
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