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RTVE reparte otros 15 M. entre productoras pese a incumplir la ley en producción propia

El presidente de RTVE, José Antonio Sánchez

La RTVE que invierte cada año 380 millones de euros en mantener a su plantilla de 6.400 trabajadores no está dispuesta a rectificar su política de externalizar la parrilla de sus canales de televisión, pese a que su porcentaje de producción propia es más de 20 puntos inferior a lo que le exige la ley. Esto se demuestra en que, a sabiendas de este incumplimiento de la normativa vigente, el Consejo de Administración de la corporación ha dado el visto bueno hace unas horas a la firma de varios contratos con las productoras Gestmusic Endemol, 100 Balas, Shine Iberia, Onza Entertainment y Lavinia Audiovisual por un montante total de 15 millones de euros, según han precisado a Vozpópuli fuentes cercanas a este órgano.

El Mandato Marco que regula el funcionamiento de RTVE, aprobado en diciembre de 2007, estipula que el 55% de sus espacios de entretenimiento y variedades deben realizarse en sus estudios, pero, según un reciente informe de la Intervención General del Estado (IGAE), sólo el 31,85% de estos contenidos se hacen dentro de la casa. Es decir, se incumple claramente la normativa vigente y sus directivos, lejos de corregirlo, mantienen su política de rubricar prácticamente cada mes nuevos contratos con productoras.

En este contexto, cada vez que el presidente de RTVE, José Antonio Sánchez, presenta a sus consejeros un contrato que implica comprar un programa "llave en mano" a una productora audiovisual, se enfrenta a la oposición de los tres miembros de este órgano que no fueron propuestos por el Partido Popular, que suelen votar en contra en muchos casos o abstenerse.

Discrepancia en los programas de entretenimiento

Salvo en casos excepcionales, como el que se dio con Cuéntame cómo pasó tras la imputación de sus protagonistas, en el Consejo de Administración de la corporación existe consenso a la hora de contratar productos de ficcióndado que RTVE no cuenta con los medios técnicos necesarios para realizar estos programas. De hecho, en la última reunión de este órgano se ha aprobado la adquisición de 13 nuevos capítulos de El Ministerio del Tiempo -producida entre TVE y Onza Entertainment- por una cantidad cercana a los 9 millones de euros.

RTVE debe producir, por ley, el 55% de sus espacios de entretenimiento y variedades, pero según la Intervención del Estado, sólo realiza el 31,85%

Las diferencias entre sus consejeros surgen cuando se adquieren programas de entretenimiento que podrían producirse dentro de RTVE. Esto no sólo aleja a la corporación de cumplir las exigencias que establece el Mandato Marco en este sentido, sino que también encarece la parrilla de sus canales de televisión, según denuncian entre los consejeros críticos.

"Si estos programas se hicieran en los estudios de Prado del Rey, Televisión Española sólo tendría que asumir sus costes de producción, más altos o más bajos. Sin embargo, cuando se compran a una productora, también hay que pagar el beneficio industrial" de la empresa en cuestión, lo que encarece el contrato, destacan fuentes de de este sector del Consejo, en declaraciones a Vozpópuli.

Otro de los riesgos que entraña la externalización de la parrilla de programación es que las productoras, dueñas de los formatos que contrata RTVE, decidan firmar por otra cadena si reciben una mejor oferta. Algo que no ocurriría en el caso de los espacios de producción interna.

Las calabazas de Bertín Osborne

El ejemplo más reciente, en este sentido, es el relativo al programa de entrevistas de Bertín Osborne (En la tuya o en la mía), que fue adquirido por Mediaset el pasado marzo tras el éxito de audiencia que cosechó en Televisión Española. Su productora, Proagmana (dirigida por Pablo Carrasco) recibió una oferta tres veces mayor a la que le presentó la corporación y no dudó en cambiar de aires.

Los responsables de RTVE han decidido que sea una productora (Gestmusic) la que produzca la gala en la que conmemorará su 60 aniversario

Pese a las recomendaciones expresadas por la Intervención de la Administración General del Estado y por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, parece que los máximos responsables de la corporación no están dispuestos a cambiar de estrategia para poder acercarse, así, al objetivo de producción propia que deben cumplir por ley. Esto ha provocado situaciones tan paradójicas como que RTVE encargue a una empresa externa (Gestmusic Endemol) la producción de una gala para conmemorar su 60 aniversario.

Esta política, evidentemente, ha beneficiado al grupo de productoras audiovisuales que orbitan alrededor de RTVE. Desde, Video Mercury Films, de Enrique Cerezo (que el año pasado percibió una gran parte del importe del macro-contrato por el que se emite en La 2 una película de cine español cinco días a la semana, en prime time), hasta Globomedia (Águila Roja), Shine Iberia (Masterchef) o Ganga Producciones (Cuéntame cómo pasó). Ahora bien, ha provocado un "importante bajón de actividad" en Prado del Rey, donde trabajan cientos de trabajadores cuyas nóminas le cuestan al Estado varias decenas de millones de euros cada año.

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