Chocolate con cecina, fusiones que funcionan

Pues esto mismo ocurre con un nuevo producto que me tiene encandilado. De primeras sorprende y de segundas, convence: el chocolate negro con cecina. La idea partió de José Arévalo, propietario de las confiterías El Arriero Maragato, en un intento de unir dos de sus sabores favoritos y emblemáticos de Astorga.

Las tabletas son finas, de 80grs de peso y la palabra Astorga en relieve. Se venden en varios puntos de su ciudad natal y por todo León, envueltas en celofán y a un precio de entre 3 y 4 euros la pieza. El primer bocado sabe a chocolate negro, el segundo nos permite apreciar el toque salado y en el tercero notamos los sutiles trozos de cecina y necesitamos un amigo cerca que nos quite la tableta o los bocados continuarán hasta acabar con ella.

Chocolates Peñín también fabrica tabletas de chocolate con cecina, pero la añade en crudo en vez de tostada y horneada como El Arriero Maragato. Destacables también su interesante surtido de bombones con sabores típicos de León: con cecina, queso de Valdeón y castaña.

Si pasáis por Astorga no dejéis de probar esta interesante fusión que desatará vuestra creatividad en la cocina: tostaditas de pan con cecina y este chocolate finamente rallado por encima, o fundido y untado en el pan bajo el embutido, o acompañando a unas setas... Se me ocurren cientos de ideas de las cuales no sé cuántas aprobará mi paladar. Menos mal que soy de buen comer…