Publicado: 17/09/2014 16:52
Según un estudio publicado en 2008 en Scientific American los atletas que cruzaban más de tres husos horarios perdían el 60% de los partidos o competiciones hacia los que se desplazaban. Para reducir este porcentaje Nike ha diseñado, junto a la empresa Teague, un prototipo del interior del avión en el que cualquier deportista querría viajar.
Todo con el objetivo de ofrecer el máximo confort y que así el rendimiento de los deportistas no se vea afectado por muy lejos que tengan que desplazarse.
El avión se divide en zonas con diferentes usos
El amplio espacio es una de las mejoras más destacadas; en lugar de las 300 plazas de media que suele tener un avión convencional, el diseño del prototipo se centra en las necesidades que puede tener un equipo de 13 personas. Eliminando los cientos de plazas, hay espacio para zonas para optimizar el descanso -tanto sentado como acostado-, la recuperación física durante los traslados -evitando que las largas horas de espera afecten al rendimiento gracias a camillas, masajes y dispositivos médicos-, alimentación personalizada y socialización para celebrar victorias o mantener reuniones.
Los asientos están adaptados para deportistas tan altos como un jugador de baloncesto -con asientos reclinables para personas que superan los 2 metros y la cabina tiene la suficiente altura para que puedan caminar erguidos- o como un jugador de rugby -asientos más anchos-. Todas las butacas están aisladas individualmente en cápsulas transparentes y ambientadas con una luz tenue, para favorecer el descanso sin ser perturbado por el entorno.
Otra de las innovaciones que promete el prototipo es un sistema de climatización que ayude a mejorar la circulación. Con tanta tecnología disponible a los deportistas no les servirá la excusa del desgaste físico por el viaje.
Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.