Publicado: 01/06/2016 14:37
Las cagadas más estrepitosas de la corona española fueron:
1) SU HIJO SE COMPROMETE CON UNA DIVORCIADA
El matrimonio del heredero de Juan Carlos con Letizia Ortiz fue algo muy criticado contra la institución, ya que se trataba de una divorciada, agnóstica, republicana, que había abortado voluntariamente, y que por supuesto, no tenía ni gota de sangre azul. Por todas estas razones, mucho se habló de lo que costó masticar la decisión de Felipe, aunque aceptaron principalmente por el miedo que tenían de que éste abdicara y renunciara a la corona por luchar por su amor.
2) EL DIVORCIO REAL DE UNA DE SUS HIJAS
La revista Vanity Fair recordó en 2013 el enlace de la infanta Elena con Jaime de Marichalar, 18 años después de haberse producido. Pese a lo notable de su divorcio, los acontecimientos de aquel 18 de marzo de 1995 fueron “tremendamente relevantes”, nos contaba esta publicación. Se trataba de la primera boda real en España desde la de Alfonso XIII, en el año 1906. Incluso el rey Juan Carlos contrajo matrimonio fuera de nuestras fronteras, en Grecia. Pero 18 años después de aquel sonadísimo enlace, la hija de los reyes y hoy tía de Leonor, ponía fin a su matrimonio, dejando a Jaime de Marichalar a la altura del betún, puesto que su figura empezaría a caer en picado a partir de ese momento.
3) LA IMPUTACIÓN DE IÑAKI
El 22 de julio de 2010 el juez instructor del caso 'Palma Arena', José Castro, abrió una nueva pieza en la causa en la que pedía información sobre los convenios firmados en 2005 y 2006 entre la Fundación Illesport, el Instituto Balear de Turismo (Ibatur), dependientes del Govern balear, y el Instituto Nóos, presidido entonces por el duque de Palma, Iñaki Urdangarin. Castro levantó el secreto del sumario sobre esta pieza e imputó a Iñaki Urdangarín el 29 de diciembre de 2011 por presuntos delitos en la actividad de Nòos de evasión de impuestos, fraude fiscal, prevaricación, falsedad documental y malversación de caudales públicos.
4) SU HIJA CRISTINA, IMPUTADA
Por otra parte, se mantuvo la imputación a la infanta Cristina para juzgarla por fraude, pero no por blanqueo.
5) EL POLÉMICO MENSAJE NAVIDEÑO
La Casa Real consideró entonces que el comportamiento de Iñaki Urdangarin no parecía “ejemplar” y anunció que el duque dejaría de participar en actividades oficiales. Además, retiraron su figura del Museo de Cera, que fue trasladada a la galería de deporte, y en el tradicional mensaje de Nochebuena del rey de aquel año (2011), dijo, simplemente y dejándolo así, que la justicia sería “igual para todos”. Un mensaje que volvió a despertar la desazón de la opinión pública.
6) SU NIETO SE DISPARA EN UN PIE
Polémico también es el nieto de Juan Carlos. Jaime de Marichalar vulneró el Reglamento de Armas al permitir que Froilán portase una escopeta con la que luego se disparó en un pie.
En aquel entonces (2012), Felipe Juan Froilán de Todos los Santos tenía 13 años. Sin embargo, los menores de 14 años tienen prohibida la licencia de cualquier arma. De hecho, la ley afirma que cualquier joven entre 14 y los 18 años puede obtener la licencia especial para menores y practicar tiro deportivo. Para la modalidad de caza los menores, siempre mayores de 14, deberán ir acompañados por uno o varios cazadores mayores de edad. En todos los supuestos contemplados, el nieto de los reyes no cumplía con los requisitos legales.
7) LA CAZA DEL REY 'CAZADO'
En abril de 2012, don Juan Carlos se rompe la cadera en una de sus cacerías y salen a la luz las fotografías de los animales convertidos en trofeos, en Botsuana. Fue la primera y única vez donde Juan Carlos dijo su famoso “lo siento mucho. Me he equivocado y no volverá a ocurrir”.
8) SU AMISTAD ESPECIAL CON CORINNA
El escándalo de aquellas fotografías dio paso a otro mayor. El de la amistad especial de Juan Carlos con Corinna Zu Sayn-Wittgenstein, una princesa alemana que le acompañaba en sus viajes.
9) EL POSADO DE CORINNA
Corinna se regodeó de su buena amistad con el monarca, posando en la revista ¡Hola! (nada menos), en un estudiado posado para hacer lucir el reloj y las joyas que el Rey le regaló. Una pulsera que podría rondar en el millón y medio o los dos millones de dólares y unos pendientes de entre 2 y 2,5 quilates, por lo que su precio rondaría los 80.000 dólares.
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