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España

Sánchez fulmina a Carmona para controlar Madrid en su lucha contra Susana Díaz

El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, junto a Ángel Gabilondo y Antonio Miguel Carmona.

“Primero Tomás Gómez. Ahora Antonio Carmona. ¿Quién será el siguiente en caer, a quién van a matar ahora?” Esto era lo que decía este lunes un conocido diputado socialista de la Asamblea de Madrid. Y es que los socialistas madrileños, incluidos muchos de los que apoyaron hace algunos días a la actual secretaria general del PSM, Sara Hernández, estaban este lunes indignados con las formas utilizadas por la nueva dirección regional del partido para destituir a Carmona. “Es la segunda vez que dan un golpe de estado en pocos meses”, afirman algunos de los críticos.

Antonio Carmona inició su carrera a la Alcaldía hace casi dos años por libre. El partido estaba entonces dominado por Tomás Gómez al que no le hacía ninguna gracia que el entonces diputado se postulase para candidato al Ayuntamiento de Madrid. Pero el secretario general del PSM dejó hacer a su compañero con el que tenía una buena relación. Una de las pocas personas que le apoyó entonces fue Juan Segovia, que ha perdido el congreso del pasado fin de semana contra Sara Hernández, que representaba a Ferraz, al aparato del PSOE. Con un teléfono y dos amigos se lanzó a la calle.

Carmona recogió lo avales necesarios para ser candidato y se presentó a las elecciones. No tuvo rival en el PSOE. Se ha recorrido cientos de asociaciones, ha bailado en decenas de fiestas y se ha hecho fotos con medio Madrid, que luego no le votó. Ha actuado en decenas de platós de televisión y debatido con periodistas y políticos de todos los colores. Tampoco le sirvió.

Carmona obtuvo 249.000 votos, un 15% del total, mientras que Ángel Gabilondo logró en la ciudad un total de 416.000 votos y un 25% de los sufragios. Esa fue su tumba

Pérdida de votos

Sacó 249.000 votos, un 15% del total, tras una “mala campaña”, según reconoció él mismo este lunes. Ángel Gabilondo, candidato en la Comunidad, logró en la ciudad un total de 416.000 votos y un 25% de los sufragios. Esa fue su tumba: perder casi un 10% de votos frente a su “compañero” Gabilondo. El PSOE de Ferraz en vez de eliminarlo esa noche, lo que hubiera sido considerado normal por casi todos, continuó con la campaña que había iniciado meses antes y le despreciaba en cada ocasión que podía. Pero Pedro Sánchez, que perdió las elecciones, ganó poder por la debacle del PP y necesitaba un poco más al dócil concejal.

En Ferraz no creían a semanas de las elecciones en el candidato a Madrid, pero pensaron que cargarse a los dos cabezas de lista era demasiado. Tras las elecciones, le corrigieron el documento para el Gobierno de Madrid y le prohibieron entrar en el Gobierno de Carmena como el propio Antonio Carmona hubiera querido para él y algunos de sus concejales.

La gestora

La convivencia con Rafael Simancas y la gestora provisional no ha sido fácil estos meses. Le impusieron a sus candidatos, le restaron poder y sin embargo Antonio Carmona ha ido tragando, tragando,…

“El objetivo final es colocar en el PSM a Antonio Hernando para darle todo el poder y los votos a Pedro Sánchez en caso de un enfrentamiento con Susana Díaz” aseguran algunos críticos

No le perdonaron el beso público a su amigo el día que Pedro Sánchez echó del PSOE a Tomás Gómez. Y al ver que había algunos amagos de organizarse fuera de la gestora, Rafael Simancas, de acuerdo con Pedro Sánchez, acodó convocar un congreso extraordinario para elegir al nuevo secretario general. La promesa era que ese congreso se iba a convocar después de las generales de noviembre. La oposición consideró que Simancas y Sánchez quisieron  tomar la delantera para evitar un rival. Ferraz eligió a la alcaldesa de Getafe, Sara Hernández, como solución de compromiso, pues parecía que incluso había más candidatos dispuestos. 

“El objetivo final es colocar en el PSM a Antonio Hernando para darle todo el poder y los votos a Pedro Sánchez en caso de un enfrentamiento con Susana Díaz”, afirman personas que no comparten las tesis que Ferraz. El PSOE y Simancas no esperaban que se presentara nadie al congreso extraordinario. Y lo hizo Juan Segovia, amigo de Antonio Carmona y Tomás Gómez, y les dio un susto

Ganó Sara Hernández por 55% contra 45% en un congreso en el que ha habido votaciones en las que había más votos que personas. “Esto nunca había pasado en el PSOE”, explicaba el lunes un viejo militante socialista que ha ocupado cargos públicos. Carmona, que no apoyó a Sara Hernández, tampoco lo hizo a Juan Segovia, aunque todo el mundo sabía que estaba con el joven diputado socialista. Por su parte, Segovia no aceptó la integración de las personas si no se aceptaban sus propuestas en el congreso. Y el nuevo Partido Socialista de Madrid decidió el lunes, como primera medida, echar a su portavoz municipal que ha prometido que no se va a callar y que luchará para derrocar a la actual dirección, Contará con el apoyo de casi el 50% de la militancia. Ahora Pedro Sánchez quiere todo el partido, afirman los críticos.

De los 16.000 afiliados de Madrid sólo acudieron a votar a su secretario general 6.571. De ellos 3.693 lo hicieron por Sara Hernández, y 2.711 por Juan Segovia.  “El resto se fueron a la playa o simplemente están hartos de que el PSM lleve 30 años peleándose hasta la destrucción final”, explicaba un conocido militante. Los socialistas ya calculaban este lunes con quien estaba cada uno de los concejales del PSOE para saber si Carmona caería o no, algo que finalmente ha sucedido por seis votos contra tres. “Pase lo que pase, la que más ha ganado estos días ha sido Manuela Carmena, Podemos y Pablo Iglesias”, afirmaba un distinguido socialista.

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