Publicado: 24/06/2015 04:00
Ángel Ubide se formó como economista en la Universidad de Zaragoza, se doctoró en el Instituto Universitario de Florencia y desde 2013 colabora con el Instituto Internacional de Economía de Washington. Dispone de una gran experiencia como gestor de fondos y trabajó durante una temporada como analista de Tudor Investment Corporation. Pedro Sánchez aprovechó el pasado enero su visita a Estados Unidos para mantener un encuentro con él y proponerle entrar en su equipo económico, así como en la elaboración del programa electoral.
Ángel Ubide y Pedro Sánchez cenaron en Washington, donde repasaron la situación económica
Quienes le conocen, consideran que Ubide mantiene un equilibrio razonable en política económica, equidistante de las ideas liberales y keynesianas. Al inicio de la crisis defendió, por ejemplo, la contención presupuestaria y después de ver cómo evolucionaba se hizo partidario de una intervención firme por parte del BCE para inyectar liquidez y aplicar una política fiscal redistributiva.
Los movimientos de Pedro Sánchez para cerrar el equipo de economistas que elaborarán su oferta alternativa de Gobierno se aceleraron hace un mes, ante la sospecha de que Mariano Rajoy pueda adelantar a septiembre las legislativas. Entre las personas con las que contactó se encuentra también el presidente de Analistas Financieros Internacionales (AFI), Emilio Ontiveros, quien rehusó una implicación en primera línea por motivos profesionales. Con un reconocido prestigio en el ámbito financiero y también académico, Ontiveros se ofreció al secretario general del PSOE a seguir dándole su opinión sobre los asuntos que Sánchez considere oportunos, pero sin comprometerse a participar de forma estable en su equipo por incompatibilidad con su trabajo y también por falta de tiempo.
En una situación similar se encuentra el economista José Carlos Díez, ex de Intermoney, quien periódicamente intercambia también papeles con Pedro Sánchez sobre aspectos diversos de la coyuntura.
Búsqueda de credibilidad y solvencia ante los mercados
La elección de Jordi Sevilla como responsable del área económica ha sido bien recibida en el PSOE, pues acredita solvencia y transmite credibilidad, algo imprescindible en un momento en el que los mercados pueden haber detectado señales confusas en los pactos sellados por los socialistas con Podemos u organizaciones afines en algunos territorios. “Es alguien que no solo da crédito a la oferta económica del PSOE, sino que tiene experiencia en la administración, al contrario que algunos fichajes, como el de Luis Garicano por parte de Ciudadanos, que solo tiene experiencia académica”, aseguran las fuentes. Con el objetivo de ganar confianza, el propio Pedro Sánchez y algunos de sus colaboradores vienen manteniendo también en las últimas semanas reuniones con fondos de inversión, agencias de rating, patronales, embajadas extranjeras y cámaras de comercio, para trasladarles el mensaje de que hay un compromiso pleno con las leyes de estabilidad presupuestaria y el proceso de consolidación fiscal, asunto clave en un país cuyo endeudamiento público supera el 94% del PIB.
Fuentes socialistas informan que en la elaboración de la alternativa de Gobierno, ha habido dos fases. En la primera, Pedro Sánchez y su equipo de confianza han intercambiado opiniones y papeles con expertos que comulgan con ideas parecidas. En la segunda, que acaba de iniciarse ahora con la designación de Sevilla como cabeza visible, se busca, además de proyectar capacidad, poner blanco sobre negro la oferta electoral aprovechando también el juego que puede ofrecer de aquí a las legislativas la actividad parlamentaria y la presentación del techo de gasto y de los Presupuestos para 2016 por parte del Gobierno.
Del equipo económico de Sánchez ha sido orillado el exministro Miguel Sebastián
De la mayoría de estos trabajos ha sido orillado el exministro Miguel Sebastián, pese a los contactos que mantuvo con Pedro Sánchez en su primera andadura como secretario general del PSOE. En contra de algunas opiniones, tampoco ha sido tenido en cuenta el excomisario europeo Joaquín Almunia. Diversas fuentes aseguran que cuando Sánchez comenzó a reflexionar sobre la formación de su equipo económico, pensó también en reclutarle para esta tarea. Otras fuentes lo desmienten. En cualquier caso, el fichaje no se ha hecho realidad pues, a pesar de la buena relación que ambos mantienen, Almunia aspira a un puesto institucional y vería bien, por ejemplo, su designación como miembro del Consejo de Estado. Después de haber estado recientemente un mes de Harvard, ahora tiene varias conferencias pendientes, una de ellas en la London School of Economics. Algunos dirigentes socialistas opinan que la incorporación de Almunia al núcleo duro del equipo de asesores hubiera dado la sensación de que Pedro Sánchez se rodea de demasiados exaltos cargos, máxime teniendo en cuenta el estatus que el bilbaíno tiene en su calidad de excomisario, al que suma el de haber sido secretario general del PSOE en una de sus etapas más convulsas.
Los nombres de los 12 ‘sabios’ encargados de las diferentes parcelas del programa electoral se presentarán el próximo viernes. Además de Jordi Sevilla, figuran en este núcleo duro el exconsejero vasco Rafael Bengoa, las catedráticas Victoria Camps y Silvina Bacigalupo y la exsecretaria de Estado de Cambio Climático Teresa Ribera.
Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.