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España

Las 'primarias' se convierten en una pesadilla para el equipo de Rubalcaba: “Pueden ser nuestra ruina”

“Puede ser nuestra ruina”, afirma un veterano dirigente socialista poco satisfecho por la forma en que el 38º Congreso, más pendiente de la disputa entre Alfredo Pérez Rubalcaba y Carmen Chacón que de la salud interna del partido, cerró la polémica sobre la elección del futuro candidato al cartel electoral. En el cónclave celebrado en Sevilla hace ahora poco más de un año, se acordó que en la elección de este cartel participe no solo la militancia, 200.000 afiliados después de las últimas bajas, sino también los simpatizantes, a través de un mecanismo que todavía está por definir pero que se quiere parecer mucho al francés… si al final no se le recula y se recupera la tradición. Hay miedo a que las estructuras del partido se pongan patas arriba.

Depende de cómo se elabore el censo, el colectivo de simpatizantes del partido puede ser mayor que el de su militancia, después de las bajas de los últimos meses

Mediante este procedimiento, solo bastaría para participar en la elección del candidato firmar un compromiso o una declaración de principios que demuestre una cierta simpatía hacia el PSOE, además del abono de una cuota de inscripción que podría fijarse en dos euros. “Un auténtico coladero”, dicen fuentes socialistas, temerosas de que su partido se busque problemas añadidos sin ser seguido en el ejemplo por el resto de las formaciones políticas, sobre todo por el PP.

“El aperturismo queda bien”, reconoce un destacado dirigente socialista, “pero puede depararnos sorpresas desagradables”. Como ejemplo pone lo sucedido al ex alcalde de San Sebastián y diputado socialista Odón Elorza, que hace dos semanas no pudo asistir ni siquiera como compromisario al congreso de su partido porque su agrupación le había dejado fuera. “Son cosas feas, que carecen de sentido y de lógica”, recalca.

El ex alcalde de San Sebastián no ha podido acudir al Congreso de su partido porque su agrupación le dejó fuera de los compromisarios

Esto mismo, si Rubalcaba no lo remedia, puede ocurrir también en buena parte de las organizaciones regionales y, sobre todo, en el ‘aparato’ federal si, finalmente, se va a unas elecciones muy abiertas en las que el voto de los simpatizantes cuente igual o más, depende de lo grande que sea el colectivo, que el de los afiliados. La elaboración del censo de participantes será clave. En todo caso, para prevenir el riesgo de contagio, se ha evitado, de momento, que la militancia influya directamente en la elección del secretario general.

Pero el problema se agrava porque Rubalcaba ha cedido a convocar las primarias el año que viene, cuando se acabe la ‘tormenta’ de ideas, y su celebración va a coincidir en el tiempo con las elecciones europeas y también con la precampaña para las municipales y autonómicas previstas para 2015, que está despertando ya una enorme sensibilidad entre los dirigentes territoriales del partido.

El 'modelo francés' abre la puerta a elegir el candidato a los simpatizantes que firmen una declaración de principios y abonen dos euros

El método para organizar las primarias será aprobado de manera definitiva en la conferencia prevista por el PSOE para el otoño y se podrá aplicar también en las elecciones autonómicas, no en las municipales, a no ser que cambie el criterio de la ejecutiva federal.

El procedimiento ha puesto en alerta no solo a los candidatos mejor colocados para sustituir a Rubalcaba, sino también a la cantera de jóvenes que ven la oportunidad de aprovechar la fiebre aperturista para forzar el relevo generacional.

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