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España

El PSC suspende de sus cargos a los tres díscolos catalanistas, pero no se atreve a expulsarles del partido

La Comisión de Garantías del PSC ha suspendido cautelarmente de todos sus cargos de partido a los tres diputados del Parlament que rompieron la disciplina de voto la semana pasada. Sin embargo, por el momento no les ha expulsado del grupo parlamentario, han informado a Europa Press fuentes socialistas.

Ignasi Elena y Marina Geli dejan de formar parte así del Consell Nacional del partido y también saldrán de la Ejecutiva, de la que Núria Ventura no forma parte, aunque es primera secretaria de la federación de las Terres de l'Ebre (Tarragona). 

Este martes se reunirá en el Parlament la dirección del grupo socialista, con Pere Navarro al frente, y decidirá el futuro de los tres en la cámara, después de que la semana pasada, tras votarse la consulta de autodeterminación, el partido les diera de plazo hasta el domingo pasado para renunciar a sus escaños, lo cual no ha hecho ninguno de los tres.

Fabián Mohedano, suspendido por ir a un mitin de ERC

Por otra parte, también ha suspendido cautelarmente de la ejecutiva del partido y del Consell Nacional a Fabián Mohedano, dirigente de la corriente crítica Avancem, por asistir el pasado 14 de diciembre a un mitin del líder de ERC, Oriol Junqueras. Según han confirmado a Efe fuentes de Avancem, Mohedano ha sido informado hoy de su suspensión cautelar a través de correo certificado, el mecanismo que utiliza habitualmente la Comisión de Garantías para informar de sus decisiones a los afectados.

Miembro de Avancem, corriente catalanista crítica con la dirección del PSC a la que pertenecen también Elena y Ventura, Mohedano (1975) es secretario general del Movimiento Laico y Progresista desde 2012 y militante del PSC desde 2009, y ocupaba desde hace dos años el cargo de secretario de Libertades Públicas y Derechos Civiles de la comisión ejecutiva del partido. El dirigente socialista asistió a un acto de ERC en diciembre bajo el lema "Votar es democracia. Todos por un nuevo país", junto al exconseller socialista Ernest Maragall y el exdiputado del PSC Antoni Comín, un hecho que fue recibido con una ovación por parte de los cerca de 4.000 asistentes en el Auditorio del Fòrum de Barcelona.

Justo un día después, el PSC decidió llevarle a la Comisión de Garantías, al considerar que vulneró los estatutos de la organización, en cuyo punto tercero del artículo 4.2, relativo a "Los deberes de los militantes", señala que éstos "no potenciarán ningún otro partido que no sea el PSC", algo que en el caso de Mohedano la formación consideró entonces "explícito" e "incompatible" con su pertenencia a la ejecutiva.

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