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España

El PP se plantea llevar a Arias Cañete como candidato a la alcaldía de Madrid si Rajoy no le manda a Europa

Si a Miguel Arias le dieran a elegir, optaría sin dudarlo por irse de comisario europeo y sustituir a Joaquín Almunia. Siempre lo ha visto como un destino con el que podría coronar con un broche de oro su carrera política y esto es algo que conoce desde hace tiempo Mariano Rajoy. Existe la posibilidad de que encabece la lista europea para luego ser propuesto como comisario cuando se forme la nueva Comisión en noviembre o que directamente el presidente piense exclusivamente en él para este último destino sin el escalón intermedio de ser incluido en la candidatura de mayo. Sin embargo, fuentes del PP admiten un tercer escenario que ya está siendo barajado por los dirigentes nacionales del partido: llevar a Miguel Arias como candidato a la alcaldía de Madrid, aprovechando su buena imagen y su tirón electoral, algo de lo que Ana Botella carece para los propios votantes del PP.

En el PP se considera que Arias Cañete sería el ministro con mayor tirón electoral para retener la alcaldía de Madrid

En el barómetro del CIS del pasado noviembre, Arias Cañete figura como el ministro mejor valorado del Gobierno, por delante, incluso, de la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría. Se lleva bien con todos los sectores del partido, tiene hilo directo con Mariano Rajoy y, contra lo que pudiera parecer, ha nacido en Madrid.

La candidatura al Ayuntamiento madrileño es básica para el PP, más incluso que la de la presidencia autonómica, puesto que el peso electoral de la capital representa casi el 60% del de toda la comunidad. En las encuestas periódicas que ha manejado el partido en los últimos meses se refleja que Botella no llegaría a la mayoría absoluta y se quedaría a cuatro escaños o más de ella, por lo que le resultaría prácticamente imposible volver a gobernar, siempre a expensas de un posible pacto con el partido de Rosa Díez. En las elecciones municipales celebradas en mayo de 2011, el PP fue con Alberto Ruiz-Gallardón como cabeza de lista y le sacó al PSOE, con Jaime Lissavetzky como candidato, una distancia de 26 puntos, casi igual a la que Esperanza Aguirre le sacó a Tomás Gómez en la batalla por la comunidad.

La candidatura de Ana Botella obligaría, posiblemente, al PP a tener que negociar un gobierno municipal con el partido de Rosa Díez

Fuentes del PP consideran que si se consigue dar con un candidato potente para el Ayuntamiento, como sería el caso de Arias Cañete, la elección del cabeza de lista para la comunidad sería secundaria e, incluso, podría pensarse en dar esta oportunidad al actual presidente, Ignacio González, pese a que reúne pocas papeletas para acceder a esta responsabilidad.

El PP sabe que los socialistas se plantearán la guerra de Madrid y la Comunidad Valenciana como una oportunidad de oro, la única en varias décadas, para romper la columna vertebral sobre la que ahora se sustenta una buena ración de la mayoría absoluta que Mariano Rajoy consiguió en las legislativas de noviembre de 2011.

Algunos dirigentes del PP creen que la candidatura a la comunidad autónoma es secundaria, pues la prioritaria es la del Ayuntamiento

Es muy posible que Rajoy no diga esta boca es mía sobre la candidatura por Madrid hasta que los socialistas hayan elegido sus cabezas de lista en las primarias previstas para septiembre, ocho meses antes de la consulta electoral. Este silencio entra dentro de la lógica, aseguran en el PP, pues además de tomar la decisión sobre mapas electorales más fundados, se evitaría buena parte del ruido que acompañaría con tanta antelación a la retirada de escena de Ana Botella.

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