Publicado: 11/11/2015 11:43
"Tenemos problemas de contaminación serios", ha asegurado con gesto circumspecto el delegado de Medio Ambiente, Movilidad y Sostenibilidad del Ayuntamiento de Madrid, José Antonio Díaz-Lázaro. "Estamos a punto de estar en fase de aviso tras la fase de preaviso. Eso significa que hoy habrá limitaciones de tráfico de 90 kilómetros por hora a 70 en la M-30 (ronda de circunvalación de la ciudad). Los coches están emitiendo dióxido de nitrógeno a puntapala". En la tarde del miércoles, el ayuntamiento ha confirmado esta limitación, que empezará a funcionar a las 6 horas de la mañana del jueves.
"Nos estamos fijando en los dióxidos de nitrógeno, pero este año hemos tenido unos episodios de ozono brutales, y para limitarlos tenemos que tomar medidas más ambiciosas". Aunque no se han concretado estas medidas, sí se ha asegurado que irán dirigidas a la zona interior de la ciudad (dentro de la M-30) y que están preparando un plan para ello.
Medidas "muy restrictivas"
Las medidas, ha asegurado el responsable municipal, serán "muy restrictivas" aun teniendo en cuenta que muchos ciudadanos de la capital "necesitan el coche en su día a día para moverse". El ayuntamiento dirigido por Manuela Carmena asegura haberse encontrado con un problema medioambiental muy grave. "Ahora mismo en las escuelas de Aguirre tenemos 95 microgramos de dióxido de nitrógeno por metro cúbico".
Una vuelta por el Paseo de Recoletos es clarificadora: la fuente de Neptuno aparece difuminada por la contaminación. El aire que se respira huele a humo
El portavoz del consistorio ha realizado estas declaraciones en la presentación de un plan para instalar coches eléctricos en Madrid de la mano de la constructora alemana Daimler, que se encuentra detrás del proyecto presentado este miércoles de Car 2 Go, unos vehículos eléctricos que comenzarán a operar en los próximos días en la capital y que pretenden combinar dos conceptos: el carsharing o utilizar un coche sólo cuando se precise, y el vehículo 100% eléctrico.
Dióxido de nitrógeno
Ha sido precisamente el dióxido de nitrógeno, un gas que no estaba en las prioridades medioambientales hasta la eclosión del escándalo Volkswagen, el protagonista de las declaraciones del delegado madrileño de medio ambiente. Este gas habría estado durante años siendo emitido en cantidades muy superiores a las que las autoridades estaban evaluando. Este mismo martes, las autoridades norteamericanas han destacado que Volkswagen es la única marca que ha realizado este fraude medioambiental en su país.
Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.