Quantcast

España

De Guindos se sintió acosado por miembros del PP por las 'black': "Las balas me silbaban muy cerca"

Luis de Guindos, en una foto de archivo del G20

"Digamos que las balas me silbaban muy cerca. Alguna inquietud y situación tensa tuve aquellos días, pero mi seguridad era que contaba con el respaldo del presidente del Gobierno", escribe Luis de Guindos en su libro España amenazada, que verá la luz la semana próxima y al que ha tenido acceso el diario El Mundo. Se refiere al momento en que decidió remitir a la Fiscalía, hace año y medio, los datos sobre las tarjetas black de Caja Madrid. Del escándalo, que salió a la luz en octubre de 2014, le había informado el actual presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, y afectaba a varias personalidades del PP, incluido Rodrigo Rato.

De Guindos, que ahora medita su renuncia por otro escándalo, el del caso Soria, sostiene en esta obra -se trata de unas memorias de su labor al frente del ministerio- que aquellos días hubo un "ruido político enorme", pero él nunca tuvo "un dilema moral al respecto": "Más arriesgado hubiera sido actuar de otra manera", sostiene. Según El Mundo, De Guindos no da nombres, pero da a enteneder que había miembros del partido contrarios a destapar el caso. 

Si en aquel momento tuvo, como él sostiene, el respaldo del presidente, parece que ahora también: Mariano Rajoy presentará la obra y firma también un prólogo en el que elogia el "coraje" del ministro "en aquellos momentos tan duros"... Aunque se refiere al riesgo de rescate, no al caso de las tarjetas. Sobre el primero, escribe De Guindos que los días 24 y 25 de julio de 2012 "fueron los momentos más críticos. [...] El Tesoro español sólo podía aguantar un mes, es decir, se quedaba sin fondos para pagar las pensiones, las prestaciones por desempleo o los sueldos de los funcionarios".

Rato quiso retrasar su dimisión  

De Guindos dedica varias páginas a quien fuera su jefe, Rodrigo Rato, que, después de comunicar a Mariano Rajoy su dimisión al frente de Bankia, en mayo de 2012, intentó frenarla: "Me explicó que había pensado en aplazar su renuncia hasta la Junta de Accionistas que debía presentarse un mes después", afirma De Guindos. 

La propuesta de Rato consistía en quedarse mientras tanto de presidente, con Goirigolzarri, su sucesor, de vicepresidente y consejero delegado. "No daba crédito", dice De Guindos, que le pidió que convocase "al día siguiente" el Consejo de Administración. "Rato no era un banquero al uso, seguía siendo un político y como tal se comportó en aquellos días", describe el ministro. 

Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.