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C's no expulsará a Eva Borox, señalada por Marjaliza, hasta que sea imputada

La exdiputada de Ciudadanos (C's) Eva Borox.

Desde que el pasado 17 de marzo anunciara que dejaba el escaño en la Asamblea de Madrid para no comprometer a su partido, la exdiputada Eva Borox ha seguido vinculada a Ciudadanos. Después de su renuncia, adoptada según ella de manera personal y sin injerencias del aparato naranja, ha desarrollado una militancia de base y ha continuado moviéndose, según las fuentes consultadas por Vozpópuli, en el círculo de confianza del actual alcalde de Valdemoro y cabeza visible de C's a nivel local, Guillermo Gross.

La declaración judicial del cerebro de la Púnica, David Marjaliza, ha aportado nuevos detalles sobre los negocios que habría mantenido con Borox cuando ella era concejala del PSOE. Sin embargo, el partido, apuntan fuentes internas, no procederá a su expulsión hasta que sea formalmente imputada. Borox todavía es afiliada a C's, pese a que la portavoz naranja en el Ayuntamiento de Madrid, Begoña Villacís, afirmara el martes que "es una persona ajena al partido", según recogió Ep.

La exdiputada sigue afiliada a Ciudadanos, mientras Villacís habla de "una persona ajena al partido"

El mismo día se supo que Marjaliza también contó al juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco que habría pagado 30.000 euros a Borox, concejal del PSOE en el Ayuntamiento de Valdemoro entre 2003 y 2007, con el propósito de cambiar su voto en adjudicaciones que terminaron beneficiando al empresario.

Desde C’s recalcan que su exnúmero tres en la Asamblea madrileña dejó el escaño pese a no estar imputada ni investigada y en medio de una fuerte presión mediática en relación a una etapa de su vida en que no pertenecía a Ciudadanos, sino al PSOE. Además, inciden en que fue elegida democráticamente en un proceso de primarias por el resto de afiliados. No obstante, la formación naranja asegura que si el juez llega a imputar a la exparlamentaria, será inmediatamente expulsada conforme al código ético por el que se rige el partido. En el momento actual de la investigación del caso Púnica todavía es posible que instructor proceda contra Borox, aunque para ello serán necesarias pruebas más contudentes, sobre todo documentales, y no únicamente la palabra de Marjaliza.

Los pagos aún no se han probado con facturas

Asimismo, Marjaliza relató al juez cómo habría pagado a Borox y su marido, Raúl del Olmo, exconcejal de Ciudadanos en Valdemoro, diversos viajes en hoteles de lujo a Mallorca, Cádiz, Andorra, Almería o Denia entre los años 1998 y 2003. Sin embargo, la exdiputada naranja siempre ha negado haber recibido tales dádivas: "David Marjaliza nunca me ha pagado ningún viaje ni tampoco comisión alguna". De tales pagos todavía no han trascendido las correspondientes facturas, lo que empeoraría el futuro de Borox. El portavoz de C's en el Congreso, Juan Carlos Girauta, dijo en marzo que "si aparecen facturas que demuestran que el señor Marjaliza le ha pagado viajes", entonces "diré claramente que esta señora ha mentido", pero "estar sentados en un bar no sé si significa que hay una íntima amistad o no", declaró el colaborador de Albert Rivera en relación a unas fotografías difundidas por La Sexta.

Borox y su marido, en el centro de la polémica, continúan ejerciendo un trabajo de base para C's en la ciudad de Valdemoro

Marjaliza contó al juez la relación con Borox y su familia se rompió a raíz de un episodio que afectaba al esposo de la exedil socialista: "El Ayuntamiento inicia un procedimiento de prejubilación forzosa de su marido por un problema de discapacidad. Él era policía local. Nos pide 100.000 euros por callarse [...] Y no se le paga", señaló el empresario. Según Marjaliza, fue el entonces alcalde de Valdemoro, José Miguel Moreno Torres, del PP, quien le dijo a él que no pagara, que "ese chantaje no lo admite".

Raúl del Olmo, que dimitió como primer teniente de alcalde y concejal de Seguridad Ciudadana, Movilidad y Deportes al día siguiente de que lo hiciera su esposa, también ha continuado en la órbita del partido a nivel local, según las fuentes consultadas. Ambos se desplazaron el pasado sábado junto a la número tres de C's en la lista al Ayuntamiento de Getafe, María José Navarrete, al acto de homenaje al exconcejal socialista de Madrid Pedro Zerolo en la plaza de la capital que ya lleva su nombre.

Allí, la todavía afiliada de la formación centrista coincidió con antiguos compañeros del PSOE. De este partido y siendo portavoz del grupo municipal en Valdemoro, sí fue expulsada en 2007 por el entonces secretario regional del PSM, Rafael Simancas, que disolvió la agrupación de Valdemoro al descubrir el aterrizaje de nuevos afiliados que tenían estrecha relación con el PP local, entonces controlado por Francisco Granados, socio de Marjaliza. En cambio, Borox niega que fuera expulsada y dice que optó por no renovar su inscripción en el partido tras la llegada de la gestora. Luego se afilió al Centro Democrático y Social (CDS) y, una vez disuelta esta formación, pasó al Centro Democrático Liberal (CDL), que se integró en Ciudadanos.

Borox y su marido, en el centro de la polémica, continúan ejerciendo un trabajo de base para C's en la ciudad de Valdemoro. De puertas hacia fuera lo hacen visible a través de sus redes sociales. Sin ir más lejos, este miércoles daban difusión en sus cuentas oficiales a la firma del convenio de cesión firmado entre el Ayuntamiento valdemoreño y la Comunidad de Madrid que permitirá al Ejecutivo regional gestionar el parque de bomberos de la ciudad, operativo a partir de junio. Asimismo, el regidor Guillermo Gross y el segundo teniente de alcalde, Juan José Jiménez, suelen propagar a través de estas redes los mensajes de contenido político y de apoyo al partido que lanza la pareja.

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