Publicado: 15/04/2014 13:20
El Govern ha admitido este martes que le gustaría que el Gobierno central pidiera un dictamen a la UE sobre la integración de un supuesto estado catalán, al considerar que esa sería la vía para conocer lo que pasaría en el caso de que Cataluña se independizara, porque no hay "manual de instrucciones". "Me gustaría que el Gobierno pidiera formalmente a las instituciones europeas cómo se tiene que proceder en el caso que Cataluña fuera un estado independiente, pero no lo van a pedir porque sería tanto como aceptar que Cataluña puede ser un Estado independiente", ha subrayado el conseller de Presidencia y portavoz del Govern, Francesc Homs.
En la conferencia de prensa posterior al consejo de gobierno de la Generalitat, Homs ha dicho que la posición "definitiva" de la Comisión Europea surge cuando un Estado miembro pide un dictamen sobre un caso concreto, pero ha augurado que el criterio que se usará para tomar esta decisión, si se hace este proceso, será "político y económico". Homs ha replicado así a la posición expresada por la Comisión Europea (CE), que ha reiterado que una eventual Cataluña independiente quedaría fuera de los tratados y sería considerada como un país tercero, y por lo tanto fuera de la Unión Europea (UE).
El portavoz del Govern ha subrayado que, hasta ahora, ningún Estado miembro ha pedido un dictamen concreto sobre Cataluña para que se pronuncie la CE y ha pedido a los que han criticado las conclusiones del informe del Consejo Asesor para la Transición Nacional que no "tiren de titulares" y "lo lean", porque analiza todos los escenarios posibles. El conseller ha afirmado que sería preferible disponer de la posición final de la UE antes de la consulta del 9 de noviembre, para que los ciudadanos vayan a votar con "las mayores clarificaciones posibles", porque al final se trata de "no engañar a nadie".
"Sabemos que no lo van a pedir porque sería tanto como aceptar que Cataluña puede ser un Estado independiente"
Homs ha incidido en que al Govern no "le da miedo" que pidan dictamen a la CE y ha subrayado que el debate que se ha abierto en torno a la integración de un Estado catalán en el bloque comunitario pone de manifiesto que no hay un "manual de instrucciones para convertirse en estado independiente", ya que si lo hubiera "nos ahorraríamos esta discusión". Para el conseller, "negar la independencia y el derecho a la autodeterminación y amenazar con que saldrás de la UE es una contradicción" que se puede mantener en estos momentos porque "no hay nada escrito" sobre el caso catalán. Así que, a su juicio, todo se resolverá "en el campo de la política y de los intereses económicos, que es como se ha construido la UE".
Homs ha admitido que está "sorprendido" por la declaración de la Comisión Europea, al considerar que la posición "oficial" del ejecutivo comunitario que ha expresado con anterioridad es que haría un pronunciamiento "final" sobre un caso concreto a petición de un Estado miembro, y el resto son "comentarios legítimos pero no posiciones oficiales ni acordadas por la UE".
El conseller ha defendido el "rigor" del informe presentado ayer por el Consejo Asesor para la Transición Nacional de la Generalitat, que rechaza la tesis de que una Cataluña independiente quedaría automáticamente fuera de la UE y contempla como los escenarios más probables que continúe vinculada al bloque comunitario, por una cuestión de "lógica y pragmatismo", aunque contempla todos los escenarios, también una salida sine díe del bloque comunitario.
La réplica de la UE a los expertos de la Generalitat
La Comisión Europea ha replicado este martes a los expertos de la Generalitat -que sostienen que un Estado catalán seguiría en la UE- que, de acuerdo con la legislación comunitaria vigente, Cataluña quedará automáticamente fuera de la UE si se independiza, según recoge Europa Press.
"Si una parte del territorio de un Estado miembro cesa de ser parte de ese Estado porque se independiza, los Tratados dejarán de aplicarse a ese territorio", ha afirmado el portavoz del Ejecutivo comunitario, Alejandro Ullurzun, que ha repetido la doctrina oficial de la Comisión.
"En otras palabras, -ha proseguido el portavoz- un nuevo Estado independiente se convertiría, por el hecho de su independencia, en un país tercero respecto a la UE y los Tratados ya no se aplicarían en su territorio desde el día de su independencia".
El portavoz ha explicado que la Comisión ha tenido conocimiento a través del informe elaborado por el Consejo Asesor para la Transición Nacional. "No tenemos ningún comentario específico sobre este informe", ha apuntado Ullurzun.
La posición del Ejecutivo comunitario sobre la posible independencia de Cataluña o de otro territorio de un Estado miembro la ha venido repitiendo durante los últimos meses el propio presidente, José Manuel Durao Barroso, o el comisario de Competencia, Joaquín Almunia, y "no ha cambiado", según ha insistido el portavoz.
En todo caso, la Comisión ha reiterado que no es su papel "expresar su posición sobre cuestiones de organización interna relacionadas con las disposiciones constitucionales de los Estados miembros".
"Escenarios como la separación de una parte de un Estado miembro o la creación de un nuevo Estado no serían neutros respecto a los Tratados de la UE. La Comisión expresará su opinión sobre las consecuencias legales bajo el derecho comunitario a petición de un Estado miembro que detalle un escenario preciso", ha indicado Ullurzun.
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