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España

Los titulares de las 'visas black' piden el paro: Pablo Abejas solicita una prestación de 1.065 euros al mes

El ex director general de Economía de la Comunidad de Madrid, Pablo Abejas, disfrutó de tarjetas opacas en Caja Madrid

La visa opaca de Pablo Abejas registró un gasto de 246.700 euros a cargo de Caja Madrid, donde presidió la comisión de control de la entidad. Esos gastos forzaron su cese como director general de Economía de la Comunidad de Madrid y como presidente de Avalmadrid. Pero sus controversias con el dinero público no terminan con su cese: Abejas ha registrado una solicitud ante el Servicio Público de Empleo (SEPE, el antiguo INEM) para percibir la prestación por desempleo que le corresponde por sus años de cotización. La solicitud fue registrada el pasado viernes por la mañana en la Oficina de Empleo de Atocha, en Madrid, según confirman fuentes de la Seguridad Social. Esa solicitud está pendiente de un único trámite ya que la vuelta a un cargo público de Abejas dio lugar a una excedencia por servicio público que el antiguo titular de la visa opaca debe justificar.

El registro de quien fue titular de una de las 86 'visas black' ante el Servicio Público de Empleo y la oficina de Empleo de la Comunidad de Madrid dará lugar a una prestación de 1.065 euros mensuales, según fuentes del organismo, puesto que Abejas tiene derecho a la prestación máxima que concede el servicio público, equivalente al 200% del IPREM dado que tiene tres hijos.

Abejas ha sido el primero de los 86 ejecutivos que ha solicitado la prestación por desempleo, pero fuentes de la Seguridad Social consultadas por Vozpópuli aseguran que se producirán más casos puesto que algunos de los antiguos ejecutivos de Caja Madrid que ocupaban cargos públicos no disponen ahora de ninguna fuente de ingresos y legalmente tienen derecho a la prestación acumulada por sus años de servicio. En el caso del ex director general de Economía de la Comunidad de Madrid, su vida laboral incluye haber trabajado como ingeniero en Telefónica, antes de haber sido consejero en una filial del Canal Isabel II de la Comunidad de Madrid y presidente de la comisión de control de la caja. 

Muchos empleados en empresas privadas no han dimitido

En su misma situación quedan responsables de empresas privadas tras su salida de la entidad como Juan Astorqui, vicepresidente de Burson-Marsteller en España y cesado tras haber gastado 293.000 euros a cargo de la entidad. También han dimitido quienes trabajaban en empresas con capital o presencia pública: Tragsa, por ejemplo, ha cesado a Javier de Miguel, gerente en Madrid, y a quien Bankia atribuye haber gastado 172.200 euros con su tarjeta B. También Luis Gabarda, ha dejado el cargo de presidente de Inversis al que se incorporó hace cuatro meses, tras haber gastado 139.700 euros con su visa opaca.

Sin embargo, los consejeros que han presentado sus dimisiones son minoría. Los ceses registrados hasta el momento son 17 de 86 salpicados. De hecho, quienes trabajaban para grandes entidades privadas han conservado sus puestos y no se han producido dimisiones.

  • Rodrigo Rato sigue siendo consejero de Telefónica, asesor y consejero internacional del Banco Santander y sigue actuando como consejero de Servihabitat pese a estar imputado y sometido a una fianza de 3 millones de euros dictada por la Audiencia Nacional.
  • Estanislao Rodríguez Ponga sigue siendo consejero de El Corte Inglés tras haber gastado 255.400 euros con cargo a sus tarjetas opacas.

En la lista de los 17 ceses entre los 86 consejeros figuran los siguientes nombres:

  • Juan Iranzo
  • José Ricardo Martínez
  • Santiago Javier Sánchez Carlos
  • Luis Gabarda
  • Rafael Spottorno
  • Fernando Serrano
  • Juan Astorqui
  • José Nieto Antolinos
  • Rodolfo Benito
  • José Ricardo Martínez
  • José María Buenaventura
  • Ángel Gómez del Pulgar
  • Manuel José Rodríguez
  • Pablo Abejas
  • Carmen Cafranga
  • Beltrán Gutiérrez

También conservan sus puestos algunos nombres en organismos con presencia pública como la Fundación Caja Madrid, la heredera de la caja de ahorros, precisamente el organismo que debe reclamar la devolución de los fondos desviados mediante las tarjetas opacas. En esa fundación se sigue sentando, por ejemplo, Antonio Cámara, ex secretario personal de José María Aznar, sigue en la entidad pese a haber gastado 178.000 euros. Si llegara a solicitar una prestación por desempleo, Cámara cobraría por haber cotizado en Special Events, la empresa de la trama Gürtel en la que prestó servicios antes de recalar en la caja madrileña.

Con esas cifras en la mano, las dimisiones siguen siendo la excepción y no la norma tras el escándalo de las tarjetas opacas de Caja Madrid.

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