Publicado: 05/08/2014 04:00
El Rey Juan Carlos I vive tranquilo en el Palacio de la Zarzuela. Después de su abdicación el 19 de junio, su actividad se ha visto reducida a la mínima expresión. No ha salido de palacio en más de un mes pero, por fin, reaparece en escena esta misma semana. Viaja esta noche a Colombia para asistir el jueves a la toma de posesión de Juan Manuel Santos como presidente del país.
En estos días de tranquilidad y reclusión en palacio, el monarca emérito ha recibido visitas puntuales de amigos y de algún empresario.
Y también la de los máximos responsables del gigante japonés Mitsubishi, una compañía con importantísimos intereses en España. Fue en la cuarta semana de julio cuando Juan Carlos I almorzó en Zarzuela con una representación del grupo nipón, según las fuentes conocedoras del encuentro.
No ha trascendido la identidad de los responsables de la corporación japonesa que asistieron al almuerzo. La compañía está presidida por Ken Kobayashi.
El encuentro se produjo en el marco de las buenas relaciones entre España y Japón, que este año celebran su Año Dual.
El gigante nipón ha desistido de demandar al Reino de España por el hachazo a las energías renovables y los cambios retroactivos aplicados a la regulación
Según estas mismas fuentes, los jefes de Mitsubishi confirmaron al Rey Juan Carlos su apuesta por España y su interés por seguir invirtiendo en nuestro país, pese a los varapalos sufridos por la compañía en el sector renovable.
Mitsubishi contrató los servicios de Cuatrecasas para estudiar una posible demanda contra el Reino de España por los recortes sufridos en la retribución de sus plantas de energías renovables.
El socio de Acciona en el negocio termosolar ha decidido finalmente no actuar contra España y así se lo hizo saber al monarca, después de que el Ministerio de Industria y Energía haya suavizado el ajuste previsto en la retribución a este tipo de tecnología renovable.
La compañía prefiere pasar página tras la guerra abierta entre el sector renovable en pleno y el Gobierno. De hecho, ha habido un buen número de compañías nacionales e internacionales que sí ha optado por demandar a España ante los tribunales locales, pero también en instituciones de arbitraje foráneas.
Según las mismas fuentes, los jefes de Mitsubishi también mostraron al monarca emérito su interés por seguir participando en proyectos españoles, como es el caso de su participación accionarial en la sociedad que explota el Puerto de Valencia.
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