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Prisas por vender la filial colombiana de Gas Natural: el Gobierno tendrá banco asesor en un mes

El superintendente de Servicios Públicos de Colombia, José Miguel Mendoza

El Gobierno colombiano quiere resolver cuanto antes el proceso de liquidación de Electricaribe, filial de Gas Natural, intervenida desde el pasado mes de noviembre. La Superintendencia de Servicios Públicos ha puesto en marcha un proceso de selección de un banco de negocios internacional que tutele la operación. En poco más de un mes podría estar ya contratado para comenzar el proceso de buscar un comprador para la comercializadora eléctrica.

El proceso estará condicionado por el procedimiento de arbitraje que puso en marcha Gas Natural contra Colombia en el tribunal internacional dependiente de Naciones Unidas (Uncritral), por el que el grupo energético español pretende recuperar el control de Electricaribe (de la que poseía un 85%) o, en su defecto, obtener una indemnización de unos 1.000 millones de euros.

Según la prensa local, el Gobierno de Colombia busca una entidad con amplia experiencia en este tipo de operaciones. En declaraciones al periódico El Heraldo, José Miguel Mendoza, superintendente de Servicios, citó los ejemplos de JP Morgan y Goldman Sachs.

Colombia pretende culminar cuanto antes el proceso de venta de la compañía para destinar el dinero de la operación a compensar a los acreedores de Electricaribe, entre los que se encuentran, principalmente, entidades financieras y también empresas generadoras, a las que la compañía adquiría electricidad para después distribuirla por la región del Caribe, en la que opera.

Objetivo: recuperar el control

Si todo se desarrolla con normalidad, la venta de Electricaribe culminará, de esta forma, antes de que el Uncitral pueda emitir cualquier tipo de resolución sobre el conflicto planteado por Gas Natural, que actualmente está en los trámites iniciales, principalmente en la presentación de la documentación y la elección del cuerpo arbitral que se va a ocupar del asunto.

La pretensión de la compañía española es recuperar el control de una empresa que opera en un sector regulado y que, en condiciones normales, debería contar con una rentabilidad prácticamente garantizada. No obstante, la venta de Electricaribe a un tercero complicaría esta opción y dejaría como alternativa una compensación económica que difícilmente podrá ser cobrada en metálico por Gas Natural.

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