Quantcast

Empresas

Golpe de efecto de Brufau: Repsol estudia la compra de la segunda petrolera de Colombia

Antonio Brufau presidente de Repsol.

El presidente de Repsol, Antonio Brufau, mueve ficha en una semana clave. Este miércoles se celebra el penúltimo consejo de administración del año de la petrolera y el representante de Pemex, Arturo F. Henríquez Autrey, tendrá que verse las caras con el resto de los consejeros después de un mes de batalla abierta de los altos directivos de la petrolera estatal mexicana contra la gestión del máximo ejecutivo de la española, del que ya abiertamente han pedido su cabeza.

El consejo se prevé tenso, muy tenso. Pero en paralelo, el ejecutivo de Mollerusa y su equipo se están moviendo a nivel internacional para buscar una petrolera a la que destinar los ingresos de la venta de su 30% en Gas Natural Fenosa. La compañía ya tiene sobre la mesa una operación que se enmarca en su estrategia de crecer en el continente americano: se trata de la petrolera colombiano-canadiense Pacific Rubiales, que cotiza en las bolsas de Toronto y Bogotá y a cierre del pasado viernes capitalizaba en 6.365 millones de dólares canadienses (6.048 millones de dólares USA).

Fuentes empresariales confirmaron que Respol está analizando esta operación, en línea con la estrategia marcada por su presidente de supeditar la venta de su participación histórica en la gasista catalana, valorada a precios de mercado en 5.432 millones de euros, a encontrar una petrolera internacional para comprar. Y además, Brufau quiere lanzar un mensaje directo a Pemex de que la petrolera española está redoblando su apuesta estratégica de futuro pese al revés sufrido en Argentina y a las trabas que, según sus directivos, les está poniendo la empresa mexicana, accionista histórico que ahora posee un 9,4%.

Brufau supedita la venta del 30% de Gas Natural a tener sobre la mesa una operación de compra de una petrolera internacional que haga crecer al grupo tras el varapalo sufrido en Argentina

Brufau adelantó el pasado jueves a Bloomberg que pensaba invertir unos 7.400 millones de euros en la adquisición de activos petrolíferos en Canadá, EEUU o el norte de Europa y que podría afrontar una compra de hasta 10.000 millones de euros entre coste del activo y su deuda.

Y con esa línea marcada, los ojeadores de Repsol han empezado a trabajar en la posible compra de la segunda petrolera que opera en Colombia, sólo por detrás del gigante estatal Ecopetrol. Pacific es una empresa con sede en Toronto que vale en torno a 6.000 millones de dólares y cuenta con una deuda de 3.000, con lo que "su valor de compañía estaría en ese entorno de los 9.000 y 10.000 millones de dólares que podría afrontar Repsol sin que las agencias de calificación penalizaran su actual rating, que está sólo un peldaño por encima del bono basura", señalan estas fuentes.

Pacific es una empresa con sedes en Toronto y Bogotá, bien gestionada y que opera los mejores pozos de Colombia, sólo por detrás de la estatal Ecopetrol

Desde Repsol se guarda absoluto silencio, pero las fuentes consultadas señalan que el equipo de compras de Brufau ya está analizando esta posible adquisición, máxime cuando Pacific Rubiales (la empresa coge el apellido de unos de los principales yacimientos de crudo de Colombia) es una compañía eminentemente canadiense y que, a su vez, opera en un país de gran atractivo para los inversores internacionales del sector energético.

El sólido crecimiento de la economía del país y la esperanzadora evolución de las negociaciones de paz entre el Gobierno de Juan Manuel Santos y las FARC han convertido a Colombia en un goloso destino de las inversiones internacionales.

Pacific Rubiales, dirigida por Ronald Pantin, es una empresa sólida y bien gestionada, con intereses no sólo en Colombia sino también en Perú, Guatemala, Guayana y Papúa Nueva Guinea. Hace unos días acudió a los mercados internacionales con una emisión de bonos subordinados de hasta 1.000 millones de dólares, que fueron colocados con éxito y tienen una calificación BB por parte de Standard&Poor´s. La compañía elevó su beneficio un 19% entre enero y septiembre de 2013.

El consejo del miércoles será muy tenso y obligará a Pemex a poner sus cartas boca arriba, después de que Peña Nieto se quejara a Rajoy en Panamá y de que los directivos de la mexicana hayan pedido la cabeza de Brufau

Repsol, asimismo, está analizando otras posibles compras en otros mercados para seleccionar una operación que le permita deshacerse de Gas Natural Fenosa y a la vez anunciar a los inversores a dónde irán destinados los ingresos obtenidos por la venta.

Pero el consejo que se celebra pasado mañana en la luminosa sede de Repsol en Madrid no tiene previsto analizar esas posibles operaciones en marcha. El punto principal del orden del día será la la aprobación del 'scrip dividend', que estará en línea con el del ejercicio anterior y permitirá a los accionistas elegir entre recibir la retribución en efectivo o en acciones.

Pero el tema que ocupará la mayor parte del consejo, aún sin estar en su orden del día, es la batalla abierta por Pemex, que tiene tintes políticos y ha pasado de ser un conflicto empresarial a ser un conflicto entre países, tal y como le hizo saber el presidente mexicano Enrique Peña Nieto a Mariano Rajoy el 16 de octubre en Panamá, según adelantó Vozpópuli.

Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.