El 80% de las grandes superficies no entrega alimentos a las ONG

El Gobierno ha venido a darle la razón, sin proponérselo, al alcalde de Marinaleda y diputado autonómico Juan Manuel Sánchez Gordillo, militante de Izquierda Unida (IU). Según una encuesta publicada en la página web del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente y realizada a 700 distribuidores durante el primer semestre de 2012, sólo el 20,5% de los establecimientos entrevistados "acostumbra a entregar los productos retirados a alguna ONG o banco de alimentos". Preguntado a este respecto, Sánchez Gordillo replica con la rapidez de una metralleta: "El 80% no dona".

El hombre que más revuelo ha causado en esta última semana con su "acto simbólico" de asaltar un Mercadona denuncia que una gran cantidad de los alimentos que los supermercados no consiguen vender terminan en la basura. Sin embargo, eso no es del todo cierto. La mayoría de los establecimientos (el 57,8%) sólo retira entre el 0,1% y el 5% de sus productos. Un 19,3% de los mayoristas retira entre el 5% y el 20% de sus productos. Y sólo el 1,7% de los distribuidores se ve obligado a retirar más del 20% de su mercancía según este estudio.

Sánchez Gordillo: "Al Gobierno le ha entrado miedo. El Gobierno está muy nervioso"

Sin embargo, el alcalde de Marinaleda denuncia que en Andalucía la situación es dramática, con un 35% de la población viviendo por debajo del umbral de pobreza. Por eso pide que sea mayor el número de grandes superficies que donen alimentos a los más necesitados. Vozpópuli se ha puesto en contacto con Mercadona, la empresa afectada por la acción de Sánchez Gordillo y el Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT), y no han querido entrar en ninguna polémica. Eva Pinillos, del departamento de comunicación de la compañía se ha limitado a señalar que "Mercadona ha denunciado los hechos". Y ha recordado también que la empresa "tiene fórmulas para colaborar con los Ayuntamientos, las instituciones y los bancos de alimentos". Pinillos ha puesto dos ejemplos muy concretos: "Mercadona ha ayudado a los afectados por el terremoto de Lorca y a familias afectadas por los recientes incendios que ha sufrido España".

Al igual que Mercadona, hay otras empresas distribuidoras que donan alimentos. Carrefour, otra de las afectadas por el asalto, prefirió optar por donar los doce carros de comida que pretendían 'expropiar' los sindicalistas del SAT. Pero parece que acciones como las de estas compañías no son suficiente para Sánchez Gordillo, que exige al Gobierno "un decreto ley que establezca que cinco días antes de que caduquen los alimentos sean donados por los supermercados a ONG o a instituciones de caridad".

Un 78% de los distribuidores retira alimentos

Según la encuesta de Agricultura, aunque sean pocos los productos que retiran los establecimientos, son muchos los establecimientos que retiran productos de sus estanterias. En total, un 78% de los distribuidores quita alimentos de la circulación por las fechas de caducidad. Lo que no especifica el estudio es qué hacen con ellos, si todos van a la basura o si se aprovechan de algún modo. Se procura que el número de elementos desechados sea el menor posible.

Para evitar que los alimentos caduquen, el 87% de las grandes superficies declara revisar personalmente las estanterías. Y el resto de establecimientos encuestados usa controles informáticos para tal fin. Sobre los criterios que se siguen para fijar las fechas de caducidad o consumo preferente, la mayoría de industria y productores optan por respetar lo que fija la ley, en segundo lugar por la tipología del producto y en menor cantidad por la seguridad microbiológica o por el aspecto del producto como la textura o el aroma.

El estudio del Ministerio se publicó el viernes, tres días después de que el diputado autónomico de IU lograra acaparar la atención de todos los medios de comunicación. Eso hace sospechar a Sánchez Gordillo que ha conseguido poner el dedo en el problema más gordo que hay. El alcalde de Marinaleda, cinco días después de su acción, lo tiene claro: "Al Gobierno le ha entrado miedo y el Gobierno está muy nervioso".