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El consumo de gas para generación eléctrica se desploma otro 43% en el primer trimestre

Una planta de ciclo combinado.

Parecía que estaba cerca de tocar suelo, pero ni mucho menos: en los tres primeros meses del año, el consumo de gas para generación eléctrica se desplomó un 43,3%, según datos de Enagás. Pese al derrumbe del primer trimestre, que propició una caída interanual del 10,7% en la demanda total de gas transportada por el operador del sistema, la compañía sostiene que la caída del consumo de estas plantas en el conjunto del ejercicio 2013 se quedará en el entorno del 10%.

La explicación del batacazo registrado entre marzo está, entre otras causas, en las fuertes lluvias (que han impulsado la generación hidroeléctrica), la menor demanda de electricidad y el auge de las energías renovables (que tienen preferencia en el mercado eléctrico) y del carbón (por el desplome de la cotización de los derechos de emisión), en detrimento de los ciclos.

Según datos de Red Eléctrica (REE), entre enero y marzo el consumo de electricidad cayó un 3,7% (corregidos los efectos del calendario y las temperaturas) y los ciclos combinados aportaron un 12,8% de la electricidad, frente al 15,9% de un año antes. El peso de la hidráulica en el mix fue del 15,4% (diez puntos más que un año antes) y el de la eólica (la primera fuente), del 26,6%, casi diez puntos más que en el primer trimestre de 2012.

Los ciclos "tendrían que funcionar más horas", según el presidente de Enagás

Los datos que ayer publicó Enagás confirman que la crítica situación de los ciclos combinados ha ido a peor en el arranque del ejercicio. En 2012, sólo funcionaron el 19% de las horas (un 23% en el primer trimestre de ese ejercicio), una cifra muy alejada del 55% del último año previo a la crisis, 2008 (su máximo histórico). 

La crisis de los ciclos combinados no es exclusiva de España (aunque sí más profunda) y en otros países europeos se está optando por hibernar estas plantas. GDF acaba de anunciarlo para sus centrales en Holanda, como recordó el presidente de Enagás, Antonio Llardén, en un encuentro con la prensa previo a la junta de accionistas de este miércoles.

El ejecutivo dijo que el uso de las plantas está “en mínimos” y reiteró su idea de que a medio plazo (“A lo mejor no es una medida para este año") el Gobierno, en el marco de la reforma del pool eléctrico que prepara, tomará medidas para enderezar la situación de una tecnología cuya eficiencia subrayó en términos de costes y emisiones contaminantes, y que actúa como respaldo de las renovables cuando la aportación de estas se resiente.

“Tendrían que funcionar más horas”, dijo Llardén, que reconoció que Enagás se ha equivocado ya en dos ocasiones a la hora de predecir el cambio de tendencia en el uso de los ciclos. “Cada año pensamos que hemos tocado suelo y no tocamos”, dijo.

Enagás cerró el trimestre con un beneficio de 95 millones, un 9,6% más, gracias a la aportación de activos adquiridos a finales del año pasado. Llardén destacó la eficiencia de la compañía, con unos costes un 40% inferiores a los de sus homólogas europeas y que, desde que comenzó la crisis, ha incrementado su plantilla un 20%, subrayó.

La mejora de las condiciones del mercado ha permitido a la compañía, que busca adquisiciones en el exterior, financiarse durante el trimestre a una tasa del 2,9%, frente al 3,5% contemplado para el conjunto del ejercicio.

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