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La denuncia de Ceslar: El Corte Inglés expulsó a Areces como "castigo" por su oposición al jeque

Un centro de El Corte Inglés.

Este mismo martes fue registrada en los Juzgados de lo Mercantil de Madrid la doble demanda de impugnación presentada por Corporación Ceslar, accionista de El Corte Inglés con casi un 10%, contra la dirección del grupo y el consejo de administración por dos acuerdos que tuvieron lugar en la junta de accionistas celebrada el 30 de agosto.

Según fuentes de Ceslar, la demanda ha sido presentada en plazo (éste expiraba hoy 30 de septiembre) y supone la formalización de la batalla judicial que empezó a pergeñarse el 10 de julio pasado. Ese día, el consejo de administración de El Corte Inglés estudió y aprobó el contrato que dará entrada en el capital al inversor Sheikh Hamad Bin Jassim Bin Jaber Al Thani a cambio de la concesión de un crédito por valor de 1.000 millones de euros.

Ese día Ceslar votó en contra de la firma de este acuerdo y al cambio de estatutos que iba a llevar aparejado, al igual que hizo el otro accionista rebelde, Cartera Mancor.

Posteriormente, en la junta de agosto, Ceslar mantuvo su voto negativo, mientras Mancor dio marcha atrás y no se opuso a ningún punto del orden del día.

El accionista rebelde considera que la expulsión de su consejera es un ajuste de cuentas por no someterse a las directrices del presidente y el resto del consejo 

La primera parte de la demanda de impugnación presentada este martes va dirigida contra el punto del orden del día que aprobó el cambio de estatutos para eliminar el derecho de suscripción preferente de los actuales accionistas sobre el 13% de autocartera. La aprobación de este punto permitirá al multimillonario ex primer ministro de Qatar hacerse con estas acciones de la autocartera dentro de tres años.

Ceslar no está de acuerdo con este cambio estaturario, al considerar que no beneficia a El Corte Inglés y se ha diseñado a medida del nuevo inversor, cuya entrada valora el grupo muy por debajo de su valor real, según Ceslar.

La segunda ‘pata’ de esta demanda de impugnación va dirigida contra la decisión unánime de todos los accionistas representados en la junta (excepto Ceslar) de expulsar a la consejera Carlota Areces por “los reiterados incumplimientos por Corporación Ceslar de sus deberes legales como administrador”, según dijo el mismo día de la junta el propio Corte Inglés.

Según recoge la demanda, la expulsión de la consejera, representante de los herederos de Luis Areces, es “un castigo por haberse opuesto a la operación” del inversor emiratí.

Fuentes de Ceslar recuerdan que la consejera no ha incumplido ninguno de sus deberes como administradora y se ha limitado a defender los intereses de su participación y, por extensión, de todo el grupo, dado que la entrada del jeque supone valorar el grupo muy por debajo de lo que vale realmente.

“El valor actual de El Corte Inglés estaría situado entre los 14.800 y 16.400 millones de euros. Esta nueva valoración, por tanto, sería prácticamente del doble de los entre 6.500 y 8.000 millones de euros en que se valoraron los grandes almacenes atendiendo al acuerdo firmado con el grupo catarí para la concesión de un préstamo de 1.000 millones de euros por el 12,5% del grupo de grandes almacenes (un porcentaje que podría llegar hasta el 15,25%)”, ha señalado Corporación Ceslar blandiendo un informe elaborado por la sociedad de inversión Neila Capital Partner SGIIC.

El informe ha sido incorporado a la demanda.

Sin embargo, desde El Corte Inglés se insiste en "los reiterados incumplimientos incurridos" por parte de Ceslar, así como no respetar "sus deberes de lealtad y secreto que le son exigibles como administrador al dar difusión pública a informaciones, datos, informes o antecedentes a los ha tenido acceso en el desempeño de su cargo y sobre los que debía guardar la necesaria reserva. Ese comportamiento por parte de un consejero impide el ordenado funcionamiento del órgano de administración e imposibilita la buena marcha de los asuntos sociales en perjuicio de la sociedad y el conjunto de sus accionistas", según señaló el grupo tras la junta.

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