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IAG teme que Fomento intervenga en el conflicto de Iberia a golpe de laudo

Willie Walsh, consejero delegado del holding IAG

El Ministerio de Fomento proseguirá intentando que la dirección de Iberia y los sindicatos lleguen a un acuerdo sobre el ajuste laboral de la aerolínea. Está previsto que en las próximas horas el departamento que dirige Ana Pastor vuelva a convocar a ambas partes, como ya hiciera el pasado lunes, con el fin de tratar de acercar posturas. Sin embargo, el tiempo apremia pues la primera jornada de huelga será el próximo lunes y en el seno de IAG se teme que Fomento utilice un as en la manga en forma de imposición de arbitraje.

La llamada de auxilio realizada por los sindicatos representantes de los diversos colectivos de Iberia, incluido el de pilotos, podrían de este modo tener una respuesta firme. En su calidad de regulador del sector, Fomento podría imponer un arbitraje para dirimir las diferencias entre la compañía y los trabajadores cuyo laudo final debería ser respetado por ambas partes.

Esta decisión supondría un revés para los planes de IAG, que hasta el momento apenas se han desviado de la hoja de ruta prevista y plasmada en el denominado Plan de Transformación de Iberia, presentado el pasado 9 de noviembre. El único avance significativo logrado en las negociaciones entre la dirección de Iberia y los sindicatos, esto es, los acuerdos para establecer las bases de las conversaciones que se establecieron en la sede del Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA) fueron echados por tierra en el consejo de administración que el holding que agrupa a Iberia y su socio British Airways celebró el pasado 24 de enero.

Horas antes de que empiece la huelga, el Gobierno podría sacarse un as de la manga: un arbitraje forzoso

Aquel documento incluía una serie de compromisos, como dar prioridad al ERE actualmente en curso en Iberia, que IAG considera incompatibles con los ajustes que quiere introducir en la aerolínea española con el fin de que vuelva a la rentabilidad en el menor tiempo posible, dejando en un segundo plano el desarrollo de la compañía y su capacidad.

El caso llegará a los tribunales

Sin embargo, IAG no podría hacer lo mismo en el caso de que Fomento dictase una resolución que pusiera en marcha un proceso de arbitraje sino que tendría que acatar la decisión que se incluyera en el correspondiente laudo. Por el momento, el regulador del sector aéreo se ha limitado a hacer llamamientos al diálogo, que ya hicieron que los sindicatos desconvocaran la huelga que habían programado para la semana previa a las fiestas de Navidad, y a reunirse tanto con la dirección como con los sindicatos para tratar de acercar posturas. Teniendo en cuenta el escaso margen de tiempo, no se descarta que pase a la acción.

Ayer, Ana Pastor no quiso pronunciarse sobre esta posibilidad pero sí aprovechó para recordar que el aéreo es un sector liberalizado que cuenta con el Ministerio de Fomento como regulador.

Después de que acabara el plazo dado por IAG para cerrar la negociación sobre el plan de ajuste, que venció el pasado 31 de enero, Iberia procedió a comunicar la puesta en marcha de un ERE para 3.807 empleados que se aplicará conforme a la última reforma laboral. Los sindicatos llevarán ese ERE a los tribunales al entender que ya hay uno en curso y que la dirección de Iberia se comprometió en el SIMA a darle prioridad frente a cualquier que se aprobara posteriormente.

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