Quantcast

Empresas

CVC aceleró la destitución de Arroyo por el desplome dramático de cuota de Deóleo

El aceite de Hacendado ha roto el mercado en España alcanzando cuotas enormes

La semana pasada, Deóleo cortó la cabeza a su consejero delegado, Manuel Arroyo, exitoso ejecutivo con experiencia en Coca-Cola en Asia y que había aterrizado en la compañía hace tan sólo un año y unos pocos meses. Junto a este directivo con esperiencia en Asia se marchó también prematuramente el presidente, José María Vilas, que tan sólo llevaba 2 años en el cargo. Según ha sabido este periódico, CVC, dueño de la compañía aceitera cotizada, adelantó acontecimientos en medio de un retroceso importante en las ventas. Según la compañía, sin embargo, Arroyo fue sustituido por "la necesidad de que el primer ejecutivo de la sociedad tenga un perfil más especializado en la gestión eficiente de procedimientos y el control de costes", tal y como informó a la CNMV.

Arroyo fue llamado a las oficinas de CVC con muy poca antelación para comunicarle allí que prescindían de él. El directivo tenía previsto un viaje para Estados Unidos y difícilmente podría esperar lo ocurrido, según fuentes conocedoras de la situación. El ex de Coca-Cola no esperaba para nada ser relevado de sus funciones de esta forma súbita. Al fin y al cabo, en los últimos meses él había sido el encargado de remodelar el equipo directivo de la empresa aceitera, incorporando a ejecutivos afines.

Pero para CVC no se podía esperar más. Los datos de Nielsen a los que ha accedido este diario no engañan. La compañía ha perdido 3 puntos de cuota de mercado en España en un año, pasando de un 12,3% a un 8,8%. Casi 2 puntos de volumen en 12 meses son casi los que ha cogido la marca blanca (de un 68% a un 70%). Aunque España sólo supone un 20% del negocio, la caída es dramática, pasando de 33 millones de litros vendidos en julio de 2015 a 23 millones este año. En Italia también hay caídas del 25%, que se suman a retrocesos en Estados Unidos y en el resto del mundo. Deóleo ha decidido en muchos casos perder este volumen, pues de forma voluntaria ha optado por dejar de vender sus referencias menos rentables, tal y como indicó el propio Arroyo en marzo, cuando la empresa tenía más de 2.000 referencias y sólo 100 de ellas se vendían, algo muy poco eficiente.

La compañía, que viene dando bandazos desde prácticamente su nacimiento en 2011, fue valorada en 1.000 millones de euros por el fondo CVC, pero la caída en su ebitda -que se recupera levemente durante los últimos trimestres- deja esta valoración real en unos 400 millones. Por el momento, vale menos que su deuda, que en el primer semestre era de 543 millones de euros. Su desapalancamiento ha sido, sin embargo, notable, pues en 2009 debía más de 1.500 millones. Fuentes próximas a la compañía aseguran que CVC, que ha vendido hace una semana los centros hospitalarios Quirón, intentará minimizar pérdidas y tal vez alguna fusión o venta. En Italia siempre han querido recuperar las marcas Bertolli, Carapelli y Sasso, seguramente el mayor activo de la sociedad ahora mismo. Una fusión con otro actor del sector en España o el exterior también se observa como una de las posibilidades.

Mejora del ebitda

La propia compañía reconocía en un comunicado a CNMV enviado en agosto la caída de cuota en mercados principales como España. Pero prefiere confiar en la capacidad de crecimiento de ebitda que ha mostrado en los últimos trimestres. La estrategia de ir hacia las ventas con más margen puede tener poco futuro en España, donde Mercadona y el resto de supermercados hunden el precio del aceite de oliva. En este entorno, las ventas en la división 'sur de Europa' han bajado de 200 millones a 150 millones de euros en sólo 12 meses.

Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.