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Economía

Los criterios contables del Gobierno engordan artificialmente el déficit en más de 4.000 millones

El agujero del 8,9% está inflado artificialmente

El déficit del Estado no ha dejado de engordar desde el 31 de diciembre: del 6% que reportó el PSOE al 7,2% que adelantó el ministro De Guindos, al 7,5% que corrigió el ministro del Interior, al 8,5% que firmó en marzo Montoro y –finalmente—al 8,9% que se ha cerrado en la contabilidad oficial. Cinco cifras en cinco meses que explican no sólo por los nuevos problemas derivados de la crisis sino también por la nueva ingeniería contable que aplican Gobierno y autonomías.

El Ejecutivo del PP ha variado algunos de los criterios contables que usaba el PSOE dando como resultado un agujero mayor de lo esperado en 2011. Ese cambio de criterios contables ha sido recogido en el Plan de Estabilidad 2012-2015 remitido por el Ejecutivo a Bruselas hasta engordar el agujero de las cuentas públicas en, al menos, 4.011 millones de euros. Los mecanismos son varios:

1.- Doble contabilidad de gastos: Según el cuadro recogido en el plan de ajuste, el Gobierno de Rajoy contabiliza como déficit público los 594 millones de euros invertidos en Unnim pese a que  el Fondo de Garantía de Depósitos tiene obligación legal de devolver esos fondos al Estado. Así, se han engordado 594 millones de un déficit que no se ha producido realmente.

Eso significa que el Gobierno apuntó como déficit casi 600 millones que no lo serán y dispondrá ahora de 600 millones en ingresos que tampoco preveía. El resultado es un desfase contable de 1.188 millones que exageran el tamaño del ajuste necesario.

Esa misma paradoja de doble contabilidad se repite en varios de los capítulos llamados “one-off” (gastos no recurrentes) enviados a Bruselas. El Gobierno justifica su decisión en las obligaciones que impone la contabilidad internacional” pero hay decisiones que responden únicamente a la voluntad política de uno u otro ejecutivo.


2.- Autorizaciones de gastos denegados anteriormente: El Ejecutivo de Rajoy ha dado luz verde a subvenciones en el filo del calendario. Una partida de subvenciones de 30 millones de euros para Canarias el 30 de diciembre de 2011, con cargo al ejercicio que se cerraba oficialmente ese mismo día. La autorización de gastos, que había sido denegada por Elena Salgado, fue aprobada por Cristóbal Montoro con cargo al año en que todavía gobernaban los socialistas.

3.- Baile de ingresos: Fuentes de Hacienda reconocen que se ha roto “la continuidad de criterio” en ciertos ingresos contables. Así ha ocurrido con parte de la recaudación del Sorteo del Gordo. Pese a que Loterías cumplió con sus criterios y remitió sus cuentas a la IGAE con su recaudación de 2011 (2.681 millones de euros, según datos a cierre de diciembre), el Ejecutivo ha contabilizado casi 800 millones del Gordo de 2011 como ingresos de 2012. La maniobra no constituye una ilegalidad pero sí resulta atípica y supone engordar artificialmente la recaudación del año del ajuste.

Loterías insiste en que sus criterios contables no han variado y que cualquier movimiento se habría producido al margen de la Sociedad. En una nota emitida por la Sociedad de Loterías, la empresa asegura --tal y como recogió Vozpópuli-- que ha respetado sus criterios de imputación de ingresos y gastos. Sin embargo, no recoge qué criterios ha utilizado Hacienda. 


Saldo final: un déficit menor al declarado

El resultado final de las maniobras contables hace prácticamente imposible conocer cuál sería el tamaño final del déficit si se hubieran mantenido los mismos criterios contables que en pasados ejercicios. Sin embargo, todas las fuentes consultadas aseguran que sería categóricamente menor que el declarado y que, por tanto, los recortes necesarios deberían ser también inferiores a los anunciados.

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