Publicado: 09/09/2016 04:00
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) vive, en los últimos meses, en un estado de rebelión interna permanente. La cúpula directiva del regulador anda enfrascada en una guerra sin cuartel desde hace meses, tal y como ha venido informando Vozpópuli.
El bando rebelde está boicoteando la operativa del regulador y poniendo la proa al presidente, José María Marín Quemada, varios consejeros no acuden a los plenos por norma y el caos político por la falta de Gobierno contribuye a que la situación se prolongue sin visos de solución.
Y para colmo, los trabajadores de la institución, concretamente el personal laboral, también han montado su particular rebelión contra el “despotismo y escarnio de estos individuos”, en referencia a la cúpula directiva.
El personal laboral se concentra hoy en las sedes de Madrid y Barcelona al grito de: "Que dimitan ya"
Según la nota enviada por el comité de empresa de Madrid a Vozpópuli, todo el personal laboral está convocado hoy a las 12:00 horas en una concentración de 15 minutos en las sedes del regulador en Madrid y Barcelona. Desde el comité de empresa de Barcelona también se es muy crítico con la labor de la "secretaría general" y la "aquiescencia e instrucciones" del presidente, si bien se muestra un tono más comedido en el comunicado oficial publicado ayer.
“El motivo no es otro que la desfachatez que continúa mostrando la empresa ante el proceso negociador del Convenio Colectivo. Su disposición es nula y su actitud propia de diletantes. Si no están capacitados para negociar que dimitan ya. No podemos consentir esta pasividad que sólo beneficia a unos pocos y perjudica a la mayoría”, afirma el duro texto del comité de empresa madrileño.
“Llevamos más de dos meses esperando a que nos reciban para comenzar el proceso de negociación. La megalomanía del ‘hombre más valiente de España’, es decir el Sr. Marín Quemada, según algún vocero afín, contrasta con la nula sensibilidad ante los derechos laborales de la plantilla de este organismo. La falta de información a éste Comité de empresa continúa aun cuando la inspección de trabajo les recomienda acabar con dicha práctica”, añade el comunicado.
Al grito de “hay que pararlos, no consintamos más despotismo y escarnio de estos individuos”, el comité va a movilizar a los trabajadores, en un hito más del caos interno que sufre el regulador.
La guerra abierta entre el bando rebelde y el presidente Marín Quemada está bloqueando la operativa del regulador, mientras el Gobierno en funciones mira para otro lado
Desde hace meses, hay dos consejeros que no acuden a los plenos en señal de protesta por el mantenimiento en su cargo de Antonio Maudes, director de promoción de Competencia y hombre de confianza del presidente.
El bando rebelde pidió su cabeza, pero Marín Quemada le ha mantenido en el cargo y los consejeros Fernando Torremocha y Benigno Valdés, han dejado de acudir a los Plenos, reunión en la que se toman las decisiones más importantes del regulador.
No sólo ellos están en guerra. El consejero Eduardo García Matilla también ha decidido ausentarse en las últimas reuniones. Todos ellos están alineados con la vicepresidenta, María Fernández, que sí asiste a las reuniones.
La guerra abierta (y reconocida por las partes) se desarrolla batalla a batalla, ante el silencio cómplice de un Gobierno en funciones que no ha tomado cartas en el asunto.
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